Agustín Canales: “Nuestro objetivo es conseguir una visión 360 del paciente y del sistema para aportar valor añadido al proceso quirúrgico”

Director de la división de Traumatología de Cardiva

Cardiva

Redacción
Tras más de 30 años de experiencia en distribución, comercialización y fabricación de productos médicos, Cardiva ha inaugurado hace sólo seis meses una nueva división de traumatología, un sector tremendamente maduro que, según las previsiones, en los próximos 10 años crecerá a una velocidad del 6% debido al desarrollo de las enfermedades crónicas.

Tal y como explica Agustín Canales, director de esta nueva línea de negocio, la compañía se introduce en esta especialidad con un ambicioso plan de trabajo: representar primeras marcas de productos que toquen todas las áreas del negocio, desde cirugía reconstructiva, osteosíntesis, medicina regenerativa, columna o productos dedicados a las infecciones, así como prótesis tumorales o hechas a medida.

¿Por qué decide la empresa dar este paso y qué la lleva a abrir un área de traumatología?
Para Cardiva era una era una decisión estratégica, porque necesitábamos un negocio que nos proporcionara un crecimiento orgánico y, además, que tuviera unos intereses transversales con otras áreas de negocio consolidadas, como la división clínica o la de dolor.

Empezamos a trabajar en el área de traumatología en diciembre del año pasado y ya hemos realizado más de 150 cirugías en rodillas, caderas y hombros

Por otro lado, la compañía está apostando muy fuerte por proyectos de medicina regenerativa y nuestro objetivo es posicionarnos en el ámbito de la traumatología para tener un nombre en el mercado cuando los productos biológicos que se están desarrollando se encuentren disponibles.

¿Y en qué fase de implantación se encuentra ahora mismo la nueva línea de negocio?
Empezamos a trabajar en el área de traumatología en diciembre del año pasado y ya hemos realizado más de 150 cirugías en rodillas, caderas y hombros. Ahora estamos realizando acopio de material y estableciendo una red de comercialización mixta entre personal directo y potenciales agentes.

Un tema que suele preocupar al sistema sanitario es la fractura por fragilidad que a largo o incluso a medio plazo, conlleva una alta mortalidad. ¿Se puede reducir con una buena intervención quirúrgica esta mortalidad?
Cuando hay una fractura de cadera muchas veces no se sabe si el paciente se ha caído porque se ha roto la cadera o si se la ha roto al caerse. La cirugía de cadera es una de las intervenciones quirúrgicas más seguras, fiables y reproducibles que existe en el mundo.

El reto que tiene actualmente el sistema es instaurar una visión más transversal que insista en la prevención, dar una respuesta inmediata y facilitar una recuperación ágil del paciente

Además, es un procedimiento muy agradecido, porque el paciente rápidamente nota una mejoría. La cuestión es si los sistemas sanitarios son capaces de realizar este procedimiento con la rapidez necesaria, ya que lo ideal es operar el mismo día que se produce la fractura para evitar cualquier tipo de comorbilidad relacionada.

Creo que el reto que tiene actualmente el sistema es instaurar una visión más transversal que insista en la prevención para que las personas mayores conozcan las pautas que deben seguir para evitar una fractura de cadera, dar una respuesta inmediata y facilitar una recuperación ágil que permita al paciente incorporarse a su vida normal de manera rápida.

¿Cómo ha aumentado la incidencia en los últimos años y cómo cree que va a evolucionar?
El crecimiento es sostenido. La población tiene una expectativa de vida cada vez más alta, los pacientes que entran a quirófano cada vez son más jóvenes y tienen unas demandas mayores.

Estamos trabajando en un producto que acelera y hace más eficiente la regeneración celular para eliminar las cicatrices quirúrgicas

En cirugía primaria quizá puede haber un crecimiento de doble dígito porque llevamos muchos años operando este ámbito y, por lo tanto, la tanto la cirugía de revisión cada vez se está popularizando más.

La cantidad de pacientes que se encuentran esperando fecha para cirugía es importante, entre otras cosas, porque todavía hay pacientes esperando desde el Covid-19, cuando la cirugía electiva se frenó, y el sistema sanitario tiene dificultades para absorber a todos esos pacientes, aunque es cierto que se están realizando operaciones por las tardes y también se están produciendo muchas derivaciones.

¿Cuáles son las principales necesidades no cubiertas de estos pacientes?
Yo diría que la prevención es fundamental, porque las complicaciones de la cirugía aumentan cuando el paciente tiene otros problemas de salud como, por ejemplo, obesidad, y esto también hace más difícil la rehabilitación.

Es necesario lanzar información clara sobre sobre salud pública y la importancia de llevar dietas saludables, cuidar las articulaciones o hacer ejercicio con regularidad y también informar correctamente a los pacientes sobre los procedimientos que se les van a realizar para que sepan lo que les va a ocurrir y puedan reducir sus niveles de estrés.
Las cirugías deben ser procesos en los que, una vez controlado el dolor, el paciente pueda volver a casa rápidamente y tener una rehabilitación correcta con un feedback de su cirujano, que incluso podría realizarse de manera remota.

La tecnología añadida al implante que ofrecen nuestros productos fomenta la integración y la rápida recuperación del paciente

Hay una tendencia muy clara en el mundo pero que en España todavía no se ha popularizado que es la de los llamados sistemas de fast track o rapid recovery, donde lo que se intenta es buscar un procedimiento más transversal que pasa por prevenir, informar correctamente al paciente para que entre a quirófano con mayores garantías, y una monitorización y rehabilitación más ágil y cercana.

Anteriormente ha mencionado los medicamentos o productos biológicos. ¿Está la empresa trabajando en el uso del plasma para tratar lesiones?
El biológico es un producto bastante controvertido porque en algunos casos cuenta con bastante evidencia científica y en otros no hay tanta, y esto aumenta la susceptibilidad del paciente.

Existen procedimientos que suelen ser autólogos, como el plasma rico en plaquetas, el ácido hialurónico para para reducir y mejorar el dolor que produce el roce de las articulaciones o, incluso, ácidos hialurónicos que tienen esteroides para tener un efecto más potente.

Cardiva cuenta con un servicio de logística extrema que permite reponer los productos en menos de 48 horas y tener presencia en quirófano para dar soporte a los equipos quirúrgicos 

Internamente estamos muy centrados en el ámbito de la medicina regenerativa para intentar que las células sean capaces de regenerarse más rápido, con mayor eficiencia y que, además, no dejen ningún tipo de cicatriz. Estamos trabajando intensamente con la Agencia Española del Medicamento en este aspecto y esperamos poder lanzar un producto en los próximos años.

En el último año la cirugía robotizada ha experimentado un gran desarrollo y estos avances han permitido reducir el tiempo en quirófano y los plazos de recuperación. ¿Qué puede aportar Cardiva en este campo?
Las aportaciones son diversas y no solamente en el ámbito del producto, sino también en cuanto al procedimiento.

Sin embargo, me gustaría matizar que el nombre de cirugía robótica no es del todo apropiado porque actualmente lo que existe es un brazo asistido que cuenta con un sistema de navegación y de información intraoperatoria, mientras que en la cirugía robótica hay una cierta autonomía de la máquina que, por el momento, no existe, aunque llegará dentro de un tiempo.

En Cardiva nos hemos incorporado al mercado de la traumatología de la mano de un nuevo socio: Permedica, un fabricante italiano que tiene un porfolio muy extenso en cuanto a implantes quirúrgicos de reemplazo articular en rodilla, cadera y hombro, recubrimientos de última generación, recubrimientos hipoalergénicos o de titanio. La tecnología añadida al implante que ofrecen estos productos fomenta la integración y la rápida recuperación del paciente.

Se van a producir mejoras tanto desde el punto de vista instrumental como en la tecnología asociada al implante gracias a la introducción de la robótica o la realidad aumentada 

Pero, además de esto, Cardiva pone a disposición del sistema sanitario un servicio de logística extrema que permite reponer los productos en menos de 48 horas, utilizar nuestros sistemas de radiofrecuencia para para tener una reposición inmediata o tener presencia en quirófano para ayudar y dar soporte a los equipos quirúrgicos de los hospitales. También ofrece formación técnica y tecnología asociada al implante mediante sistemas de navegación de smart tools para comprobar la colocación del implante en rotación, en extensión o con los cortes.

En definitiva, intentamos tener una visión 360 del paciente y del sistema y aportar valor añadido al procedimiento.

¿Qué mejoras vamos a poder ver en el futuro en el ámbito de la investigación?
La investigación de los implantes va hacia unas instrumentaciones más precisas, ya sea en navegación intraoperatoria, cirugía o con un brazo robótico, que permite tener mayor precisión en los cortes. Por lo tanto, se van a producir mejoras tanto desde el punto de vista instrumental como en la tecnología asociada al implante gracias a la introducción de la robótica, la realidad aumentada y la planificación preoperatoria.

En relación con el diseño de los implantes vamos a encontrar recubrimientos hipoalergénicos y ultra endurecidos con recubrimientos de impresión aditiva, donde el poro del titanio es muy elevado y la capacidad de fijación primaria de los implantes es mucho más alta que en los implantes convencionales.

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