Uno de cada cuatro euros gastados en el SNS no está aportando valor en términos de salud y bienestar

El 39ª Congreso de la Sociedad Española de Calidad Asistencial ha alertado sobre el problema del malgasto en el Sistema Nacional de Salud

Redacción
“Uno de cada 4 euros gastados en el SNS no está aportando valor en términos de salud y bienestar”, según ha expuesto Salvador Peiró, investigador de la Fundación de Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana (Fisabio) durante una de las mesas del XXXIX Congreso de la Sociedad Española de Calidad Asistencial (SECA), que se está celebrando en Murcia.

En su ponencia El despilfarro en el Sistema Nacional de Salud. Una aproximación a su coste, Peiró ha señalado diferentes fuentes del malgasto que se produce en el SNS, desde fallos en la prestación de la atención, hasta los errores en la coordinación, la complejidad administrativa, los precios excesivos por temas de monopolios y patentes, el fraude, el abuso y la mala gobernanza o la sobreutilización, entre otros.

“El malgasto no solo es gasto por utilización también es el coste del fracaso terapéutico y de las reacciones adversas”

Peiró ha puesto énfasis en que el malgasto no solo es gasto por utilización; “también es el coste del fracaso terapéutico y de las reacciones adversas”. Por ejemplo, ha comentado que 1,7 millones de ingresos en urgencias se producen “por eventos adversos”.

Según ha expuesto Peiró, existen muchos estudios que revelan ese malgasto. En primer lugar, el coste de la sobreutilización podría superar el 10% del gasto total del SNS. Y ha aportado algunos datos: “los estudios en el SNS ofrecen, según hospitales, cifras del 1 al 24% de cirugía innecesaria para cataratas, 12% para artroplastia de rodilla y del 5 al 14% para artroplastia de cadera”, ha añadido.

“Existe poca información para cuantificar el impacto de esta miscelánea de elementos en términos de malgasto, pero no sería demasiado aventurado conjeturar que podría suponer entre el 5% y el 10% del gasto sanitario total”

En opinión de Peiró, existe “poca información para cuantificar el impacto de esta miscelánea de elementos en términos de malgasto, pero no sería demasiado aventurado conjeturar que podría suponer entre el 5% y el 10% del gasto sanitario total, aunque en parte se solaparía con el procedente de otras fuentes de malgasto”.

Con todos estos datos sobre la mesa, Salvador Peiró ha lamentado que “es posible que una cierta proporción de malgasto sea inevitable, pero siempre son recursos que se detraen de la atención a otros pacientes”.

También ha participado Óscar Moracho del Río, gestor sanitario. Como conclusión de esta mesa, ha argumentado que faltan ciclos completos de evaluación y mejora. “La calidad tiene que ser la punta de lanza de la transformación del sistema sanitario; es imprescindible como horizonte de trabajo”, ha finalizado.

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