Cristina Cebrián
La sustitución del tratamiento antimicrobiano intravenoso por tratamiento oral, la llamada terapia secuencial, ha supuesto un cambio de paradigma en el abordaje de la neumonía comunitaria. Varios estudios internacionales han demostrado que esta terapia reduce los tiempos de ingreso hospitalario y, por tanto, mejora la calidad de vida de los pacientes.
Este es uno de los beneficios que destacó el Dr. José Barberán, médico del Servicio de Medicina Interna del Hospital HM Montepríncipe y profesor en la Facultad HM Hospitales de Ciencias de la Salud Universidad Camilo José Cela de Madrid, durante la ponencia Terapia secuencial en la neumonía comunitaria, en el marco de la V Jornada Anual de Neumonía, organizada por el Grupo de Estudio de Infecciones en el Paciente Crítico de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc) y que cuenta con la colaboración de Meiji, entre otros laboratorios.
La terapia secuencial consigue disminuir el riesgo de infecciones del torrente sanguíneo e infecciones relacionadas con el catéter y se reducen los costes en equipos médicos
Otra de las ventajas de la terapia secuencial es que “no repercute negativamente en la tasa de mortalidad ni en la recurrencia de infecciones. Además, disminuyen los ingresos en UCI y se logra una estabilidad hemodinámica”, aseguró el Dr. Barberán. El internista recordó que también se consigue disminuir el riesgo de infecciones del torrente sanguíneo e infecciones relacionadas con el catéter y se reducen los costes en equipos médicos, así como el tiempo de los cuidados enfermeros. Por otra parte, destacó la reducción potencial de la huella de carbono, “un aspecto importante en la era en la que vivimos”.
Antibióticos “ideales” para esta sustitución
El principal requisito para la administración de la terapia secuencial es que el paciente se encuentre estable clínicamente. Es decir, que presente “una frecuencia cardiaca y respiratoria adecuada, sin fiebre, con una saturación adecuada y que el paciente pueda comer y beber para establecer el tratamiento oral”, explicó el Dr. Barberán.
A la hora de implementarla, se encuentran disponibles diferentes fármacos antibióticos de sustitución del tratamiento intravenoso. El especialista matizó que deben utilizarse fármacos “con un espectro antimicrobiano similar al que se sustituya, con una alta biodisponibilidad, poco seleccionante de mutantes resistentes y, a ser posible, que tenga un bajo coste”.
Dr. José Barberán: “Los médicos no son conscientes de la existencia de esta terapia. Deberíamos concienciarnos de los beneficios que puede aportar esta estrategia terapéutica”
En este sentido, el Dr. Barberán mencionó la amoxicilina-clavulánico por vía oral (VO), en sustitución de la amoxicilina-clavulánico intravenosa (IV); cefditoreno VO para reemplazar la ceftriaxona IV y levofloxacino VO como sustituto de levofloxacino por vía intravenosa. Sobre el uso del antibiótico cefditoreno VO, el internista comentó que “dada la baja concentración mínima inhibitoria (CMI) que tiene para la inmensa mayoría de cepas de neumococo, con la dosis de 400mg cada 12h se puede alcanzar el objetivo de superar el 40% del intervalo entre dos dosis consecutivas sin problema”.
Barreras ante la implantación de la terapia secuencial
Las guías internacionales de práctica clínica recomiendan el uso de la terapia secuencial. Sin embargo, en España todavía no se ha implementado completamente. Según el Dr. Barberán, el motivo es que “los médicos no son conscientes de la existencia de esta terapia”. Por ello, insistió en que “deberíamos concienciarnos de los beneficios que puede aportar esta estrategia terapéutica”.
Para ello, también se necesita establecer programas de terapia secuencial en los hospitales. “Hay que identificar y seguir a los pacientes con neumonía, que exista un feedback entre especialistas y monitorizar a los pacientes para medir las intervenciones y conocer el impacto positivo de esta terapia. Deberíamos implementar estos sistemas para institucionalizarlos en los hospitales”, concluyó el internista.