Gema Maldonado
Un grupo de profesionales ya trabaja en el Ministerio de Sanidad en la reclasificación profesional de las enfermeras, de TCAEs y celadores. Así lo han comunicado la ministra de Sanidad Mónica García y el secretario de Estado de Sanidad Javier Padilla en la rueda de prensa posterior al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud celebrado en Madrid este jueves.
Un grupo de profesionales ya trabaja en el Ministerio de Sanidad en la reclasificación profesional de las enfermeras
Si bien la reclasificación de las enfermeras para integrarlas en la categoría A1 no se ha tratado en el Interterritorial, García ha dicho que el Ministerio “tiene el compromiso” de llevar a cabo ese cambio de categoría. “Sin las enfermeras el SNS se caería, estamos trabajando en equipo todas las categorías porque es hora de reclasificar y reconocer”, ha asegurado.
Menos clara está la posibilidad de que los médicos pasen a formar parte de una hipotética nueva categoría, denominada A+, como piden los sindicatos profesionales. El secretario de Estado ha puntualizado que el grupo formado en Sanidad para estudiar la reclasificación “está trabajando para reclasificar lo que la Ley nos manda”. Actualmente, y tras la implantación del Plan Bolonia, enfermería es un Grado, por lo que no tiene diferencia de reconocimiento con las antiguas licenciaturas. Su reconocimiento profesional con la categoría A1 iguala a las enfermeras con los graduados en Medicina, algo que no convence a los sindicatos médicos que piden la creación de una categoría profesional superior.
Javier Padilla sobre una posible categoría A+ para médicos: “Sería hacer una reclasificación sobre una categoría que no existe. Hay que trabajar en el ámbito de Función Pública para ver si existen casuísticas compartidas con otros ministerios”
Sin embargo, Javier Padilla ha puesto en duda que sea posible esta opción, ya que no es una cuestión que esté únicamente en manos de Sanidad, sino que también estaría implicado el Ministerio de Función Pública. “Sería hacer una reclasificación sobre una categoría que no existe. Hay que trabajar en el ámbito de Función Pública para ver si existen casuísticas compartidas con otros ministerios”, ha apuntado. El equipo ministerial tiene previstas reuniones con representantes de los profesionales sanitarios. “Nos comprometemos a hablarlo”, ha zanjado.
Delimitar medicina de familia respecto a urgencias y edad de jubilación
El de este jueves era el primer Consejo Interterritorial del SNS en el que Mónica García se reunía en persona con los consejeros de Sanidad de las comunidades autónomas, un encuentro que ha transcurrido “con bastante cordialidad” y del que “hemos salido muy contento”, ha dicho la ministra. Una percepción que no comparten todos los consejeros autonómicos, ya que tras finalizar el encuentro, los titulares de Castilla y León y Galicia han mostrado su descontento con la ministra por no incluir en el orden del día la falta de médicos en atención primaria. Una cuestión que Mónica García ha dicho que se tratará en un pleno monográfico “a principios de 2024”.
Los consejeros de Sanidad de Madrid, Galicia y Castilla y León consideran que “no hay garantías” de que la especialidad de urgencias “no vaya a implicar la merma” de plazas en medicina de familia
Para el consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, el Ministerio está echando “balones fuera” con la cuestión de la falta de médicos, y su homólogo en Galicia, Julio García Comesaña, ha lamentado que el Gobierno central “ignorase” abordar “nuevamente” el déficit de médicos de familia. Junto con la consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute, han expresado sus dudas sobre la posibilidad de que la nueva especialidad de medicina de urgencias y emergencia pueda competir con las plazas de medicina de familia y comunitaria. Durante el Interterritorial se ha presentado el borrador del proyecto de Decreto ley de la nueva especialidad, una información que no consideran suficiente.
“Ha dejado muchas dudas”, ha afirmado el consejero de Castilla y León. “El documento que se nos ha presentado no nos esclarece si realmente se van a perder plazas de médico de medicina familiar y comunitaria con respecto a los médicos de urgencias”, ha añadido. Por su parte, García Comesaña ha lamentado que “no hay garantías de que no vaya a implicar la merma” de plazas de medicina de familia.
En esta línea, la consejera madrileña ha señalado que una de sus reclamaciones “era que no estaba bien claro si se diferenciaban las plazas de familia respecto a las de emergencia, y que no podíamos penalizar ese número de plazas precisamente creando una especialidad, sino todo lo contrario, que tenía que quedar bien claro que iban a aumentar ese número de plazas tan necesarias”, ha explicado en declaraciones recogidas por Europa Press.
Mónica García: “Fueron las comunidades las que se comprometieron a que esta especialidad no comprometería las plazas de medicina de familia y comunitaria”
La ministra ha afirmado en rueda de prensa que “queda perfectamente delimitado lo que tiene que ver con la especialidad de familia y con urgencias, si bien es verdad que hay una parte de conocimiento que es común, como ocurre en otras especialidades“, y ha aclarado que “fueron las comunidades las que se comprometieron a que esta especialidad no comprometería las plazas de medicina de familia y comunitaria”.
Una de las vías que apoyan varias comunidades autónomas para paliar la falta de médicos en atención primaria es ampliar la edad de jubilación de los médicos a los 72 años. Sin embargo, el Ministerio de Sanidad se ha mostrado en contra de esta posibilidad. “No vamos por la vía de exprimir a nuestros profesionales”, ha dicho Javier Padilla, “lo que hay que hacer es tener la capacidad de que los médicos que terminan la especialidad se queden a trabajar y tener el orgullo de que después de 30 o 40 años de trabajo, nuestros médicos puedan retirarse”.
Gestión del Covid-19 y Agencia Nacional de Salud Pública
La ministra de Sanidad ha asegurado que la Agencia Estatal de Salud Pública “es una prioridad” y que espera que en 2024 “sea efectiva”. El objetivo es que contribuya a mejorar la coordinación, las capacidades y la gestión del SNS. “Hay una parte del trámite parlamentario que se quedó colgada, pero queremos darle continuidad. Es nuestra primera prioridad para que, a la vuelta de la Navidad, pueda seguir su curso y que en 2024 podamos tenerla para que sea efectiva”, ha anunciado.
En este punto, García ha recordado que se trata de una de las peticiones del informe Evaluación del desempeño del Sistema Nacional de Salud español frente a la pandemia Covid-19, realizado por expertos independientes y que se ha dado a conocer este mismo jueves. Este estudio ha evidenciado que las carencias que presentaba el SNS antes de la pandemia repercutieron negativamente sobre ella, como el debilitamiento de la atención primaria o de la salud pública.
“El informe nos hace recordar algo que nos tendríamos que grabar a fuego: una nueva pandemia no solo es posible, sino probable”, ha aseverado García, que ha recordado la importancia de “estar mejor preparados”. “El informe es interesantísimo. Somos uno de los pocos países que hemos hecho esta evaluación y creo que hay que ponerlo encima de la mesa”, ha añadido.
