Pablo Malo Segura
El coste de vacunar a la población sana en España administrando las vacunas que les correspondan por grupo de edad según el calendario a lo largo de toda la vida de 2023, supondría un coste anual de casi 565 millones de euros. Esta cifra supone cerca de un 23% del gasto sanitario en servicios de prevención y de salud pública y un 0,5% del gasto sanitario total. “A pesar del incremento sustancial en el gasto que han supuesto las modificaciones introducidas en el calendario de vacunación, implica una mínima parte del gasto total en sanidad”. Así lo asegura el artículo Actualización del coste de vacunar lo largo de toda la vida en España para el año 2023, que se ha publicado en la Revista Española de Salud Pública.
“A pesar del incremento sustancial en el gasto que han supuesto las modificaciones introducidas en el calendario de vacunación, implica una mínima parte del gasto total en sanidad”, señala el estudio
Si se considerase a la vacunación de la cohorte de nacidos en 2023 (329.251 nacimientos, según datos del INE de 2022), el coste de vacunarlos a lo largo de toda la vida con el calendario actual se estima en 500,4 millones de euros. El informe señala que con las modificaciones realizadas en el calendario en 2023 existe una “menor diferencia” entre el coste de vacunar a una persona sana y el de vacunar a una persona con condiciones de riesgo respecto al año 2019. “La vacunación frente a herpes zóster (HZ) y meningococo grupo B (MenB) fueron las que más influyeron en el aumento del coste y la vacunación frente a VPH en varones la que menos”, resalta.
El trabajo destaca que “la vacunación es, sin duda, una de las medidas más coste-efectivas en materia de salud pública”. Además, recuerda que es una herramienta básica de prevención y control de las enfermedades transmisibles prevenibles por vacunación. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la vacunación previene entre 3,5 y 5 millones de muertes por enfermedades como la difteria, la tosferina, el tétanos, la gripe y el sarampión.
Con las modificaciones realizadas en el calendario en 2023 existe una “menor diferencia” entre el coste de vacunar a una persona sana y a una persona con condiciones de riesgo frente a 2019
Las vacunas han ayudado al aumento de esperanza y calidad de vida en el último siglo. “Los programas sistemáticos de vacunación en España han contribuido al descenso a niveles mínimos de la incidencia y mortalidad de enfermedades como el sarampión, la tosferina o el tétanos. A nivel mundial estas enfermedades siguen siendo la causa anual de muerte de 116.000, 80.000 o 34.000 personas, respectivamente”, explica el informe. Además, precisa que hay que tener en cuenta los gastos sanitarios y sociales derivados de la carga de estas enfermedades evitadas.
El coste de la vacunación a lo largo de toda la vida de una persona sana se calculó en 700 euros de media en 2019. En cambio, con las modificaciones introducidas en el calendario este coste aumenta a 1.519,87 euros, lo que refleja un incremento del 125%. Esto se debe a una serie de factores como el elevado precio de vacunas como HZ o MenB, el aumento del coste de vacunación anual frente a la gripe por el cambio a vacunas tetravalentes y el uso de vacunas de alta carga en población mayor de 80 años, así como la introducción de la vacunación anual frente a al gripe en población de 6 a 59 meses.
Loa autores concluyen que “sigue siendo rentable vacunar a una persona a lo largo de toda su vida, fundamentalmente a aquellas con condiciones de riesgo”
El informe también resalta que con la introducción de la vacunación frente al virus del papiloma humano (VPH) se ha reducido la diferencia en el coste de la vacunación entre hombres y mujeres sanas frente a 2019. Actualmente, la única diferencia entre los calendarios de ambos sexos se encuentra en las recomendaciones de vacunación en el embarazo.
Los autores del artículo concluyen que pese al incremento del coste como consecuencia de las modificaciones realizadas en el calendario en los últimos años, y teniendo en cuenta el gasto sanitario que supone el tratamiento de las enfermedades prevenibles por vacunación y de sus secuelas, “sigue siendo rentable vacunar a una persona a lo largo de toda su vida, fundamentalmente a aquellas con condiciones de riesgo”. Con el envejecimiento progresivo de la población, parte del coste sanitario derivado de las enfermedades inmunoprevenibles podría disminuir si se aumentan las coberturas de vacunación en la edad adulta, “actualmente muy bajas”, resaltan.