La SEMI actualiza su protocolo para un abordaje óptimo de la DM2

Uno de cada tres pacientes que ingresa en los servicios de Medicina Interna tiene esta enfermedad, aunque no acudan por ese motivo. De los vistos por internistas, entre el 30% y el 40% tienen obesidad

Redacción
La Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) celebró los pasados 25 y 26 de enero la XVIII Reunión del Grupo de Diabetes, Obesidad y Nutrición. Esta edición tuvo lugar en Sevilla, hasta donde se dieron cita más de 260 médicos internistas. La diabetes mellitus tipo 2 (DM2) abarcó gran parte de un evento donde se analizaron las principales novedades diagnósticas y terapéuticas en los campos de estudio del grupo de trabajo (diabetes, obesidad y nutrición).

Aproximadamente uno de cada tres (entre el 30% y el 35%) pacientes que ingresan en los servicios de Medicina Interna de los hospitales españoles tienen DM2. Incluso aunque el motivo de la atención hospitalaria no sea la diabetes. De estos, se estima que entre el 30% y el 40% de los que son vistos por médicos internistas vive también con obesidad.

Es más, la obesidad sigue infradiagnosticada (apenas el 40% tienen el diagnóstico), infratratada (menos del 20% reciben medicación con evidencia científica) y menos del 1,3% de los profesionales prescriben dicha medicación. Los profesionales reunidos recordaron la “imperiosa” necesidad de que esta sea reconocida en nuestro país como  “enfermedad crónica”. A su vez, pidieron que se implementen medidas para “evitar y atajar su infradiagnóstico e infratratamiento”.

“Esta visión integral, característica del internista, lo es más si cabe cuando hablamos de estas patologías”, destacó la Dra. Juana Carretero, presidenta de la SEMI. El exceso de adiposidad es una base común para diversas patologías, como la DM2, la obesidad, la enfermedad metabólica hepática, la insuficiencia cardiaca con FEVI preservada o los problemas del sueño.

La obesidad sigue infradiagnosticada e infratratada: menos del 1,3% de los profesionales prescriben dicha medicación

“Por eso, nuestra labor es concienciar a nuestro compañeros sobre la necesidad de poner el foco en dicha adiposidad. Así como reclamar, una vez más”, instó la presidenta, que la obesidad sea reconocida como enfermedad crónica y que las personas que la padecen reciban una atención equitativa y de calidad”.

La reunión sirvió para presentar un “relevante consenso” en el que han participado nueve sociedades científicas sobre el manejo de la enfermedad metabólica hepática. Dicho consenso pretende, en palabras de la Dra. Carretero, “dar respuesta a las preguntas más frecuentes sobre el diagnóstico, la estratificación, el pronóstico y el adecuado manejo de la misma. Así, se establecen tanto protocolos de screening como de manejo interdisciplinar y recomendaciones basadas en evidencia sobre el tratamiento”.

Nueva versión del algoritmo para el manejo de DM2

En el transcurso de la reunión, se presentó como es habitual cada año la nueva versión de 2024 del “Algoritmo de manejo integral de la Diabetes Tipo 2” de la SEMI. También se anunció la creación de nuevos registros que permitan continuar aportando evidencia del trabajo de los internistas en este campo. Asimismo, se expusieron las principales novedades en formación del grupo en los campos de la diabetes, la obesidad y la nutrición para el presente año.

En palabras del Dr. Pedro Pablo Casado Escribano, coordinador del Grupo de Trabajo de Diabetes, Obesidad y Nutrición de la SEMI: “Como en cada edición, la reunión agrupó todas las novedades más relevantes en las áreas de Diabetes, Obesidad y Nutrición que se han producido en el último año. En particular, muy destacadas las novedades sobre el impacto de los arGLP1 en obesidad, con datos de reducción de eventos macrovasculares en el estudio SELECT y de mejoría clínica en insuficiencia cardíaca con fracción de eyección preservada (estudio STEP)”.

Durante la reunión se expusieron las principales novedades en formación del grupo en los campos de la diabetes, la obesidad y la nutrición para el presente año

Se trataron también temas de relevancia científica como el binomio “alteraciones del sueño y enfermedades metabólicas”; la evaluación y tratamiento de la sarcopenia en el paciente con diabetes o las novedades farmacológicas y de tratamiento en DM2. Al mismo tiempo, hubo cabida para distintas actividades en formato taller en la mañana del residente (una de las novedades) centradas en urgencias diabetológicas; manejo de los factores de riesgo vascular en diabetes o el papel de las asociaciones de pacientes. Además, se organizó un debate con el título ‘Edulcorantes, ¿dulce veneno?’. Por su parte, la conferencia inaugural tuvo por título ‘Buscando los orígenes históricos de la diabetes: papiro de Ebers y medicina en el antiguo Egipto’.

En relación a la desnutrición relacionada con la enfermedad, en palabras del Dr. Casado, “es destacable la cada vez más extensa evidencia sobre el impacto de la desnutrición relacionada con la enfermedad, campo en el que el internista tiene mucho que decir por su alta prevalencia en nuestros pacientes en los diferentes ámbitos de actuación clínica”.

Según los datos del estudio OBEMI, la prevalencia de obesidad (IMC>30) en las consultas de medicina interna es del 23,6%. Cifra que de progresar la prevalencia global de obesidad en España como lo está haciendo “seguirá incrementándose”. Eso se une a la “complejidad de identificar correctamente a la obesidad sarcopénica, también de elevada frecuencia en medicina interna, y que “aun con un índice de masa corporal elevado, está implicando un pronóstico desfavorable en el contexto de la deficiencia de masa muscular”, resalta el Dr. Casado Escribano.

En la mencionada mañana del residente, además de organizarse un concurso de casos clínicos, se abordaron diferentes aspectos de relevancia para su formación. “El manejo de las posibles urgencias diabetológicas” (hipoglucemias, cetoacidosis diabética y coma hiperosmolar), fue uno de ellos. También el del resto de factores de riesgo cardiovascular en el paciente con DM2. O bien el abordaje de la obesidad, conociendo tanto las herramientas diagnósticas como terapéuticas a su alcance.

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