Anuario iSanidad 2023
Redacción
La psoriasis es una de las patologías más prevalentes en dermatología y tiene un alto impacto en la calidad de vida a nivel físico y emocional. En múltiples ocasiones los pacientes se sienten estigmatizados cuando esta enfermedad se presenta en áreas visibles como la cara y las manos. El Dr. Enrique Herrera, jefe de servicio del Hospital Universitario Virgen de la Victoria de Málaga, destaca los avances en investigación a nivel terapéutico. “Con los medicamentos de nueva generación conseguimos tasas de control de la psoriasis del 90%”, ha destacado. Por ello, afirma que el reto terapéutico actual está en el paciente moderado y en el medio. Además, destaca la importancia de las unidades de psoriasis.
¿Cuál es la prevalencia de la psoriasis en España y a qué edad es más frecuente su diagnóstico?
En España hay diferentes estudios sobre prevalencia y se estima que oscila entre el 1,5 y el 4%, lo que se traduce en aproximadamente un millón de personas que viven con psoriasis en España. No todos los casos son psoriasis graves, también hay leves y moderadas. En cuanto a la edad de aparición, la psoriasis puede aparecer en cualquier momento de la vida porque es una enfermedad genética. No obstante, en la adolescencia y entre los 60-65 años son los momentos en los que se registran el mayor número de casos.
“Se estima que la prevalencia oscila entre el 1,5 y el 4% en España. En la adolescencia y entre los 60-65 años se registran el mayor número de casos”
¿Qué impacto tiene la psoriasis en la calidad de vida de los pacientes tanto a nivel físico como emocional?
El impacto a nivel físico va a depender mucho de la gravedad de la lesión y de la exposición. Desde un punto de vista físico, no es lo mismo tener una lesión a nivel genital, por ejemplo, que tener una lesión a nivel de los codos. Nosotros esto lo valoramos en base a la extensión, dando una serie de puntuaciones y valorando qué extensión tiene. Físicamente, limita mucho la actividad diaria de las personas, sobre todo en casos moderados o graves, en cuanto a poder ir al gimnasio, a la playa, o si es a nivel genital incluso a poder tener relaciones con tu pareja.
A nivel psíquico sería la consecuencia de todo esto. Hay muchas personas que están cohibidas y tienen una vida social o personal muy limitada. Sienten vergüenza y no se atreven a comunicar lo que tienen porque piensan que los demás van a pensar que es contagioso. En los últimos años se ha avanzado mucho en este sentido, pero es cierto que sigue habiendo un cierto complejo a comunicar la enfermedad o a que la gente los vea. Existen numerosas situaciones que marcan su día a día y esto al final va a establecer la huella de psoriasis, que es el daño psíquico que ha hecho la enfermedad en los pacientes que conviven con ella durante mucho tiempo y después les cuesta eliminar el complejo que tienen incluso aunque esté controlada.
En la actualidad no existe un medicamento que cure la psoriasis. ¿Cuáles son los objetivos que se plantean a nivel terapéutico en su abordaje?
Si por curar entendemos tomar una pastilla y que la psoriasis desaparezca, eso no existe. A la psoriasis se le pide que se cure, creo que es una cosa injusta porque esto no pasa con otras enfermedades como la hipertensión, la miopía, la insuficiencia cardiaca o la diabetes.
“Conseguir el aclaramiento completo va a permitir al paciente tener una mejor calidad y que pueda desarrollarse desde un punto de vista personal, profesional, familiar y a todos los niveles”
Actualmente, existen medicamentos que controlan la enfermedad casi al 100%, con los que conseguimos que una persona que tenga la enfermedad esté controlada siempre y cuando se trate. Se trata de medicamentos de nueva generación con los que podemos llegar a conseguir tasas de control de la enfermedad del 90% en muchos casos, esto es muy potente.
¿Por qué es importante lograr el aclaramiento completo de la piel?
Se trata de una enfermedad visible de cara al exterior y que va a condicionar la relación con los demás. Vivimos en un entorno social donde la imagen es muy importante a nivel personal y profesional. La psoriasis, siempre y cuando no afecte las articulaciones ni a otros órganos, es una enfermedad cutánea, pero que va a afectar mucho desde el punto de vista psíquico. Conseguir el aclaramiento completo va a permitir al paciente tener una mejor calidad y que pueda desarrollarse desde un punto de vista personal, profesional, familiar y a todos los niveles.
La psoriasis es una enfermedad de la piel inflamatoria, inmunomediada y crónica. ¿De qué forma actúan los nuevos tratamientos sobre la inflamación? ¿Pueden modificar el avance de la enfermedad?
El paradigma de la enfermedad hoy en día sería controlar las alteraciones inflamatorias inmunológicas que se producen en la cascada inflamatoria.
“La parte de pacientes con psoriasis moderada-grave que están insatisfechos tienen toda la razón. Nosotros abogamos desde hace mucho tiempo por las unidades de psoriasis”
Con los nuevos medicamentos intentamos controlar estas alteraciones y dirigirnos a la diana terapéutica, intentando no dañar otras partes e ir solo a la parte que está inflamada. Desde un punto de vista terapéutico, el objetivo es la curación para que el paciente esté totalmente asintomático y no tenga lesión.
Según la encuesta Next Psoriasis, llevada a cabo por Acción Psoriasis entre 1.265 pacientes de toda España, el 13% de los pacientes con psoriasis moderada-grave no reciben actualmente asistencia sanitaria y los que reciben tratamiento son tratados de forma subóptima. Además, existe una insatisfacción con el tratamiento en hasta el 47% de los pacientes con psoriasis moderada-grave. ¿Qué factores explican estos resultados y cómo se pueden mejorar estas necesidades no cubiertas?
A mí me gusta analizar estas cifras dándole la vuelta y viendo que el 87% por tanto está satisfecho. La parte de pacientes con psoriasis moderada-grave que están insatisfechos tienen toda la razón. Nosotros abogamos desde hace mucho tiempo por las unidades de psoriasis. En los hospitales de primera línea debe haber unidades específicas para manejar a este tipo de pacientes complejos y con tratamientos modernos.
Esto evidentemente no se puede hacer en todos los sitios porque no todo el mundo es especialista en psoriasis a un nivel óptimo. Es algo normal porque la especialidad ha ido creciendo y esta línea de tratamiento cada vez se ha ido haciendo más específica.
“El reto terapéutico está en el paciente moderado y en el leve, porque el grave lo tenemos muy controlado siempre y cuando se trate”
El acceso a los tratamientos a veces está limitado en ciertas zonas debido a que no hay una unidad de psoriasis o porque el médico que hay allí no es experto en psoriasis. Esto al final requiere que el paciente sea derivado a estas unidades. Hay gente que todavía está tratando la psoriasis con medicamentos de hace 20 años, lo que va en detrimento de la calidad que recibe el paciente. Por tanto, entiendo perfectamente que el paciente esté insatisfecho.
¿Cuáles son las líneas de investigación más prometedoras en psoriasis?
Desde un punto de vista terapéutico podríamos decir que en psoriasis estamos muy cerca de haber llegado al culmen. Las últimas moléculas, inhibidores de la interleucina 23 (IL-23) e inhibidores de la interleucina 17 (IL- 17), son muy potentes y podríamos decir que actualmente casi tenemos bajo control la psoriasis.
El reto terapéutico está en el paciente moderado y en el leve, porque el grave lo tenemos muy controlado siempre y cuando se trate. En el paciente leve y el moderado probablemente tenemos que empezar ahora a utilizar estos tratamientos biológicos que tan bien han ido con otras dosis, pautas y vías de administración para intentar “dar cobertura” a estos pacientes que tienen psoriasis más leves, que siguen siendo limitantes. Creo que este tipo de pacientes es el que más se puede beneficiar de estos tratamientos. En cuanto a nuevas moléculas, destacaría los inhibidores de la JAK-kinasa por vía oral. No van a dar mejores resultados que actualmente, pero la vía oral puede hacer que sea una administración más moderna y fácil de administrar. Actualmente, no hay demasiadas novedades terapéuticas en moléculas en psoriasis.