Redacción
El Dr. Rafael Areses es médico estomatólogo postgraduado en cirugía oral e implantología, es consultor y asesor de empresas de tecnología, y miembro activo del board de varias compañías del sector IT. En una entrevista con iSanidad, realizada en colaboración con Talentua, analiza la situación de la transformación digital en odontología y subraya la necesidad de iniciar la formación en inteligencia artificial para estos profesionales.
¿Cuáles son las oportunidades que ofrece la inteligencia artificial en odontología y en qué áreas concretas aporta un mayor beneficio?
Oportunidades ofrece todas aquellas que queramos ver en las vulnerabilidades e incompletitudes de la odontología con respecto a otras industrias o sectores. Tendemos a ver la odontología exclusivamente en su parte clínica, pero la gestión administrativa y del tiempo que el paciente está fuera de la clínica, como su captación externa, selección de personal, planes de marketing y de negocio o agenda de citas, son terrenos de mucha más urgencia y asequibilidad de automatización que los clínicos, que siempre llevan una más compleja automatización.
“La gestión administrativa y del tiempo que el paciente está fuera de la clínica, así como su captación externa, son terrenos de mucha más urgencia y asequibilidad de automatización que los clínicos”
¿Qué habilidades deben tener los profesionales del sector odontológico para poder sacar el máximo partido de estas herramientas?
La capacidad de adaptación a nuevos flujos de trabajo y la capacidad de superación en los casos concretos. Asimismo, su capacidad económica, siempre que sepan priorizar las necesidades de su clínica frente a las suyas propias, podrían ser una ventaja en lugar de una vulnerabilidad. Para ello, necesitan un asesoramiento adecuado en gestión y administración de recursos. Su excesiva dedicación a labores internas de la clínica y la falta de colaboración entre clínicas podría obrar en sentido contrario.
¿Cómo es la curva de aprendizaje para optimizar su uso?
Todavía no ha habido suficientes casos de uso. Si nos remitimos al flujo digital, que muy poco va a tener que ver con la implementación de IA, caeríamos en importantes divergencias, por lo que no debería ser el referente. A medida que vayan desarrollándose implementaciones y vayamos obteniendo datos podríamos ir definiendo los puntos que marcarían esa curva de aprendizaje, todo lo demás serían especulaciones sin demasiado fundamento.
“A medida que vayan desarrollándose implementaciones y vayamos obteniendo datos podríamos ir definiendo los puntos que marcarían esa curva de aprendizaje”
¿Se debe mejorar la formación en IA de los profesionales de la salud y, en concreto, de los odontólogos?
Es necesario iniciarla, puesto que no ha habido ninguna formación en inteligencia artificial para los profesionales de la odontología. Es necesario empezar con principios básicos, no necesariamente técnicos, aunque las bases técnicas deben saberse explicar. Pero principalmente las bases de aplicación y los casos de uso donde pueden ser utilizados, las diferentes tecnologías que se malinterpretan como una única IA, con respecto a los objetivos que estas tecnologías pueden alcanzar y aquellos que nada tienen que ver con ellas.
¿Cuáles son los principales desafíos y retos que presenta la inteligencia artificial en el sector?
Esta industria nunca se ha encontrado ante un desafío de estas dimensiones. Enumerar las diferentes segmentaciones de cada uno de los retos, sería hacerlo de todas las características en que se subdivide esta área de especialidad. Creo que los iremos descubriendo a medida que avanzamos en cada movimiento. Por el momento, destacaría el natural desconocimiento y sus derivadas de resistencia al cambio y aislamiento con respecto a otros sectores en proceso más desarrollado.
“La industria dental nunca se ha encontrado ante un desafío de las dimensiones del que representa la IA”
¿Qué ventajas ofrece esta herramienta para la gestión de clínica dental?
Es una de las áreas prioritarias en el despliegue de estas tecnologías. Bastante más asequible en el momento actual, que los aspectos clínicos. A ella le deben seguir los demás desarrollos. Incluso las normativas pueden ser mucho más fáciles de poner en práctica en esta área.
