La importancia de la proteína en nutrición clínica para la recuperación del paciente desnutrido

Yvette Luiking, responsable de Asuntos Médicos y Ciencias de la Nutrición en Fragilidad de Danone Nutricia Research

proteína

Yvette Luiking, responsable de Asuntos Médicos y Ciencias de la Nutrición en Fragilidad de Danone Nutricia Research
La proteína es un macronutriente crucial y una fuente de aminoácidos. Las proteínas y los aminoácidos tienen un papel clave en el mantenimiento de funciones biológicas, tales como: desarrollar la masa muscular para obtener fuerza y ​​movilidad (sabiendo que el músculo es el ‘depósito’ de proteínas más grande del cuerpo); promover la función digestiva e inmune (al suministrar órganos en el área esplácnica, es decir, intestino, hígado, páncreas y bazo, con aminoácidos); y apoyar la cicatrización de heridas.

Las proteínas se vuelven aún más importantes en los pacientes, en los casos de desnutrición y enfermedades. Sin embargo, en la práctica clínica, los pacientes a menudo no pueden satisfacer sus necesidades de proteínas únicamente con los alimentos. Como resultado, los pacientes entran en un estado catabólico con pérdida de masa muscular. Es posible que se requieran productos de nutrición clínica, como suplementos nutricionales orales y alimentación por sonda que puedan ayudar a los pacientes a satisfacer sus necesidades nutricionales. Esto es fundamental para mejorar el estado de los pacientes, como la cicatrización de heridas, la fuerza muscular, el rendimiento físico y la recuperación a nivel general.

La nutrición clínica es fundamental para mejorar el estado de los pacientes, como la cicatrización de heridas, la fuerza muscular, el rendimiento físico y la recuperación a nivel general

Estas y otras relevantes novedades sobre proteína en nutrición clínica han sido presentadas recientemente en el XIII Congreso de la Sociedad Andaluza de Nutrición Clínica y Dietética (Sancyd) en el que he tenido el placer de participar como representante de Danone Nutricia Research.

Proteína de origen animal VS proteína de origen vegetal: qué beneficios aporta cada una

En nutrición clínica, se usan dos tipos de proteínas: las de origen animal y aquellas de origen vegetal o plant-based. Las proteínas lácteas o de origen animal más utilizadas en los productos de nutrición clínica son la caseína y la proteína de suero, mientras que la proteína de soja y guisante se utilizan más como fuentes de proteína vegetal.

Para este último caso, las que se usan en nutrición clínica suelen ser los llamados aislados de proteínas o fuentes más concentradas que ayudan a lograr la mayor cantidad de proteína por volumen y tienen niveles más bajos de factores antinutricionales. Un nivel bajo de factores antinutricionales es importante para lograr una alta digestibilidad. En este sentido, la evidencia científica ha demostrado niveles de digestibilidad del 95% al 100% para las fuentes vegetales y lácteas utilizadas en la nutrición clínica.

Combinar fuentes de proteínas es una estrategia para equilibrar los patrones de aminoácidos, evitar limitar los aminoácidos y, por lo tanto, satisfacer todos los requisitos nutricionales

Si bien son similares en digestibilidad, las proteínas animales y vegetales difieren en sus patrones de aminoácidos. El nivel de aminoácidos esenciales (es decir, aminoácidos que el cuerpo no puede sintetizar por sí mismo) es mayor en las proteínas lácteas, pero la mayoría de las fuentes cumplen con los requisitos de aminoácidos esenciales. Por otro lado, las proteínas vegetales son más ricas en aminoácidos no esenciales (es decir, aminoácidos que el organismo sí puede sintetizar) como la arginina y la glicina.

Combinar fuentes de proteínas es una estrategia para equilibrar los patrones de aminoácidos, evitar limitar los aminoácidos y, por lo tanto, satisfacer todos los requisitos nutricionales. De este modo, una mezcla de proteína de soja y guisante sigue proporcionando una proteína de alta calidad que cumple con una puntuación de calidad alta de proteína (PDCAAS de 1), similar a la proteína animal.

La alta calidad de las proteínas es relevante, especialmente cuando la ingesta de proteínas es inadecuada, como es común en los pacientes desnutridos. En concreto, se ha observado que tan solo entre el 44% y el 53% de los pacientes hospitalizados desnutridos tienen una ingesta adecuada de proteínas el cuarto día de hospitalización. Se observan cifras similares en pacientes con cáncer.

Se debe evitar la deficiencia de proteínas en los pacientes con Desnutrición Relacionada con la Enfermedad, ya que puede provocar pérdida de masa muscular

Por ello, se debe evitar la deficiencia de proteínas en los pacientes con Desnutrición Relacionada con la Enfermedad (DRE). Esta puede provocar pérdida de masa muscular, disminución del estado funcional, deterioro de la calidad de vida, aumento de la morbilidad y también mayores costes sanitarios.

El papel de los aminoácidos

Los aminoácidos son los componentes básicos de las proteínas y todos los aminoácidos cumplen funciones esenciales en el cuerpo. Se pueden clasificar en esenciales, no esenciales y esenciales condicionales. Como he mencionado anteriormente, esta clasificación se basa en si el cuerpo puede o no puede sintetizar estos aminoácidos. Lamentablemente, las recomendaciones de aminoácidos solo están definidas para personas sanas y no para pacientes con DRE o enfermedades específicas.

En las enfermedades, el metabolismo de las proteínas y las necesidades de aminoácidos cambian y los aminoácidos no esenciales pueden volverse condicionalmente esenciales. Por ejemplo, la arginina es un aminoácido no esencial, pero desempeña un papel destacado en la cicatrización de heridas. Dentro de los aminoácidos esenciales se encuentra la leucina, que es un componente básico de las proteínas que también actúa como una señal anabólica o desencadenante para estimular la síntesis de proteínas musculares.

La nutrición clínica proporciona proteínas de alta calidad, lo que significa que la fuente proteica cubre los requerimientos de aminoácidos para satisfacer las necesidades metabólicas

La nutrición clínica proporciona proteínas de alta calidad, lo que significa que la fuente proteica cubre los requerimientos de aminoácidos para satisfacer las necesidades metabólicas. Además, la nutrición clínica es una fuente eficaz de proteínas y aminoácidos en un volumen que resulta cómodo de consumir y, a menudo, mucho menor en comparación con los alimentos integrales.

Por ejemplo, 200 ml de tratamiento médico nutricional a través de la suplementación o 500 ml de producto de alimentación por sonda proporcionan la misma cantidad de proteínas (30 g) que 915 ml de leche, 600 g de guisantes cocidos o 140 g de soja cocida. Para finalizar, quiero destacar que la nutrición clínica puede contener niveles más altos de aminoácidos específicos (por ejemplo, arginina o leucina) de manera que puede satisfacer una necesidad nutricional mayor.

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