Administrar quimioterapia más inmunoterapia antes de operar el cáncer de pulmón eleva hasta un 20% las posibilidades de curación

La irrupción de la inmunoterapia en el cáncer de pulmón ha supuesto "una revolución impresionante" en el enfoque de su tratamiento, cuyas novedades se han expuesto en el XIV Congreso de la Sociedad Española de Cirugía Torácica (SECT)

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Redacción
La estrategia de tratamiento que administra quimioterapia más inmunoterapia en neoadyuvancia en pacientes con cáncer de pulmón no microcítico operables aumenta entre un 15% y un 20% las probabilidades de curación a los cinco años. Es uno de los más recientes hitos de la inmunoterapia, que ha explicado con detalle el Dr. Manuel Cobo, oncólogo adjunto en el Servicio de Oncología Médica del Hospital Regional Universitario de Málaga durante su ponencia en el XIV Congreso de la Sociedad Española de Cirugía Torácica (SECT), que se celebró en Málaga la semana pasada.

El aumento de las posibilidades de curación a los cinco años en cáncer de pulmón no microcítico se debe al uso de inmunoterapia antes y después de la cirugía

Este logro se ha comprobado en estudios que han probado la quimioterapia combinada con distintos fármacos de inmunoterapia, como pembrolizumab, nivolumab y durvalumab.  “Queda claro que con la inmunoterapia la probabilidad de que haya más pacientes de cáncer de pulmón largos supervivientes aumenta y que, incluso, en los casos de cáncer de pulmón metastásico el tumor puede llegar a desaparecer. La adición de inmunoterapia a la quimioterapia aumenta las posibilidades de que haya más pacientes supervivientes a largo plazo, es decir, de que puedan operarse, recibir un tratamiento completo y, por tanto, curarse, cuando antes recaían a los dos años“, ha destacado el Dr. Cobo, cuya ponencia se tituló El gran potencial de la inmunoterapia en el tratamiento del cáncer de pulmón.

Dr. Manuel Cobo: “Con la inmunoterapia la probabilidad de que haya más pacientes de cáncer de pulmón largos supervivientes aumenta”

Sobre el cambio de paradigma que ha supuesto la inmunoterapia en el manejo del cáncer de pulmón y sobre su “enorme potencial”, versó la ponencia del especialista. La inmunoterapia ha supuesto una revolución impresionante del enfoque terapéutico en el cáncer de pulmón, puesto que aporta una mejor respuesta antitumoral y aumenta la supervivencia libre de progresión de la enfermedad y supervivencia global de los pacientes. Asimismo, estamos empezando a ver los beneficios que tendrá en otros momentos de la historia natural de la enfermedad”, expuso.

En el caso de cáncer de pulmón no microcítico, la irrupción de la inmunoterapia supuso un cambio como tratamiento de segunda línea tras el fracaso de la primera línea con el quimioterápico platino, tras el que el tumor volvía a progresar. En estos casos “la inmunoterapia ha supuesto un ‘boom’ y se ha visto cómo algunos tumores empezaban a responder con una supervivencia a largo plazo en entre un 10 y un 12% de los pacientes con cáncer pulmonar metastásico, cuando antes de la inmunoterapia era raro que superaran los dos años”, informa el Dr. Cobo.

Dr. Cobo: “Con la inmunoterapia se ha visto cómo algunos tumores empezaban a responder con una supervivencia a largo plazo en un 10% -12% de pacientes con metástasis”

Las indicaciones y potenciales usos de la inmunoterapia están aumentando. Así, la inmunoterapia se administra sola y como tratamiento de primera línea en los tumores de cáncer de pulmón no microcítico metastásico cuando la sobreexpresión del biomarcador PD-L1 es de más del 50% en las células tumorales. Cuando la presencia de este biomarcador es inferior al 50%,el tratamiento estándar es la QT+inmunoterapia. La tasa de supervivencia de los pacientes ha aumentado gracias a estos tratamientos, que se realizan con varios agentes de inmunoterapia aprobados, como pembrolizumab, cemiplimab, ipilumumab, y atezolizumab.

Un ejemplo es su uso como estándar de tratamiento en el estadio III, cuando la enfermedad aún no está avanzada ni es metastásica, pero no es operable. En estos casos, hasta ahora el tratamiento estándar había sido la QT+radioterapia, frente al cual ahora ha surgido un nuevo tratamiento estándar consistente en QT+RT y, al finalizar, inmunoterapia, como durvalumab, durante un año como tratamiento de mantenimiento para que las células de pulmón no vuelvan a progresar a cáncer, en este estadio no operable.

La investigación de nuevas estrategias de tratamiento que exploran el potencial de la inmunoterapia están marcha

La investigación de nuevas estrategias de tratamiento que exploran el potencial de la inmunoterapia están marcha. Buscan aumentar las tasas de supervivencia empleando o sumando nuevos fármacos dentro del espectro inmunológico y no inmunológico. Otras, tratan de aumentar la tasa de curación o respuesta adicionando nuevos fármacos de inmunoterapia en
desarrollo, de los que hay centenares en investigación, para aumentar la actividad de la inmunoterapia o reducir los mecanismos de resistencia a la inmunoterapia.

También se desarrollan fármacos contra otros o puntos de control del tumor (como Tink3, Digit y Log3), destinados a activar otros
linfocitos, como las células natural killers, para aumentar la capacidad de visualización del sistema inmune y que este tenga un efecto contra el tumor.

“De los fármacos del espectro inmunoterápico solamente los inhibidores del biomarcador PD-L1 aumentan las tasas de supervivencia y curación a largo plazo en cualquier estadio del cáncer de pulmón no microcítico”, por eso “el futuro pasa por mejorar la tasa de curación desarrollando nuevos fármacos del espectro inmunológico y no inmunológico”, valora el Dr. Cobo.

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