Redacción
La Comisión de Ética y Deontología del Colegio de Médicos de Madrid (Icomem) ha publicado un documento de posicionamiento contra el Real Decreto 435/2024, aprobado en abril, que supone la asignación a la Administración de la tarea de evaluar los códigos deontológicos de los colegios profesionales a través de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
El Icomem recuerda que según el ordenamiento jurídico la regulación de las normas deontológicas, “corresponde exclusivamente a los colegios profesionales”
En su escrito, el Icomem recuerda que según el ordenamiento jurídico la gestión de las funciones públicas relacionadas con la profesión, incluyendo la regulación de las normas deontológicas, “corresponde exclusivamente a los colegios profesionales”.
El posicionamiento, respaldado por los 15 expertos que forman parte de la Comisión de Ética y Deontología, señala que “designar a un organismo gubernamental para revisar o someter a un test de proporcionalidad los códigos deontológicos de los colegios profesionales representa una extralimitación de las funciones de la Administración y compromete los intereses de los pacientes”.
“La designación de un organismo gubernamental para revisar los códigos deontológicos representa una extralimitación de las funciones de la Administración y compromete los intereses de los pacientes”
Los expertos del Icomem argumentan que la CNMC “no tiene la especialización necesaria” en las profesiones reguladas por los colegios y, por tanto, “carece de la competencia” para evaluar sus códigos de conducta. Además, consideran contradictorio que un organismo regulador del mercado supervise los fines y deberes de la profesión médica, la cual se guía por criterios no comerciales.
El Icomem subraya que los colegios de médicos son la representación legítima de la profesión y deben ser los responsables de redactar el Código de Deontología. “El poder legislativo debe valorar y promover el papel de los colegios profesionales, quienes por su capacidad de representación y la cualificación de sus miembros son los adecuados para definir los fines de la profesión en servicio a los pacientes y a la sociedad”, concluyen los expertos.