Redacción
Un grupo de investigadores suecos ha creado un cuestionario para uso doméstico que identifica rápidamente el riesgo elevado de sufrir un infarto. Según una investigación publicada en el Journal of the American Heart Association, este cuestionario tiene el mismo nivel de precisión que los análisis de sangre y las mediciones de la tensión arterial, lo que podría transformar la manera en que se detectan y previenen las enfermedades cardiovasculares.
El estudio utiliza datos del estudio de población Scapis, con sede en la Universidad de Gotemburgo de Suecia. Además, está patrocinado por la Fundación Sueca del Corazón y los Pulmones. Liderado por Göran Bergström, catedrático de Fisiología Clínica de la Academia Sahlgrenska de la Universidad de Gotemburgo y médico titular del Hospital Universitario Sahlgrenska, el estudio demuestra la eficacia del cuestionario en identificar a individuos con riesgo elevado de enfermedad cardiovascular.
Göran Bergström: “Nuestra prueba permite identificar a casi dos tercios de las personas de entre 50 y 64 años que padecen aterosclerosis coronaria significativa”
“Un infarto suele surgir de la nada. Muchos de los que sufren infartos están aparentemente sanos y asintomáticos, pero tienen depósitos de grasa en las arterias coronarias, lo que se conoce como aterosclerosis. Nuestra prueba permite identificar a casi dos tercios de las personas de entre 50 y 64 años que padecen aterosclerosis coronaria significativa y, por tanto, tienen un riesgo elevado de enfermedad cardiovascular”, explicó Bergström.
El cuestionario consta de 14 preguntas que pueden responderse en cinco a ocho minutos. Estas preguntas abordan factores como la edad, el sexo, el peso, el perímetro de cintura, el tabaquismo, la hipertensión, la hiperlipidemia, la diabetes y los antecedentes familiares de enfermedades cardiovasculares. Al combinar la información de las respuestas en un algoritmo especial, la prueba casera puede detectar el 65 por ciento de los individuos con mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.
“Los resultados demuestran que nuestra prueba casera es tan precisa como un examen clínico con análisis de sangre y mediciones de la presión arterial. Si conseguimos que la prueba esté ampliamente disponible dentro de la asistencia sanitaria, podrá salvar vidas y evitar sufrimientos al ayudarnos a identificar a quienes tienen un riesgo elevado de sufrir un infarto o que actualmente están infratratados“, añadió el profesor Bergström.
El estudio se basa en datos de 25.000 individuos de entre 50 y 64 años
El estudio se basa en datos de 25.000 individuos de entre 50 y 64 años. A todos los participantes se les examinaron las arterias coronarias mediante tomografía computarizada, lo que proporciona una imagen detallada del grado de aterosclerosis. Al comparar estas imágenes con los cuestionarios cumplimentados, los investigadores identificaron los factores que guardaban una relación más estrecha con el grado de aterosclerosis.
Además, los investigadores han iniciado también estudios en Suecia y Estados Unidos para evaluar la efectividad del cuestionario en diferentes grupos. Identificar a las personas en situación de riesgo antes de que aparezca la enfermedad es uno de los principales objetivos que se proponen.
Kristina Sparreljung, secretaria general de la fundación, señaló que se trata de “una prueba que pueda proporcionar alertas tempranas salvaría muchas vidas y mucho sufrimiento. Por ello, los resultados del estudio del profesor Bergström son sumamente interesantes.”
Este avance promete ser un gran paso hacia la prevención de enfermedades cardiovasculares, ofreciendo una herramienta accesible y efectiva para detectar riesgos antes de que se manifiesten síntomas graves.