La eliminación del VHC con antivirales de acción directa reduce la mortalidad en pacientes coinfectados por VIH y VHC

Investigadores del IIS-FJD, la Fundación Jiménez Díaz y el Rey Juan Carlos valoran el impacto de la curación de la infección por VHC en personas que viven con VIH

antivirales-acción-directa-VHC

Redacción
Un estudio del Instituto de Investigación Sanitaria de la Fundación Jiménez Díaz (IIS-FJD), en colaboración con los hospitales universitarios Fundación Jiménez Díaz y Rey Juan Carlos, ha demostrado que la curación de la infección por el virus de la hepatitis C (VHC) en personas con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) mejora notablemente el pronóstico de estos pacientes. El trabajo, publicado en el Journal of Clinical Medicine, analiza el impacto de la eliminación del VHC sobre la comorbilidad y mortalidad en coinfectados. En concreto, indica que la eliminación del VHC con antivirales de acción directa reduce la mortalidad en pacientes coinfectados por VIH y VHC.

La coinfección por VIH y VHC es frecuente en pacientes de VIH, lo que aumenta su riesgo de enfermedades crónicas y mortalidad. Así lo explica la Dra. Beatriz Álvarez, investigadora principal del IIS-FJD y primera firmante del estudio. “Aunque el tratamiento antirretroviral controla el VIH, las personas con VIH presentan una mayor incidencia de patologías asociadas, como enfermedades cardiovasculares y cáncer, debido a la inflamación crónica que genera el virus”, indica. La especialista subraya que la coinfección con VHC intensifica estos efectos, dificultando aún más el pronóstico.

La Dra. Norma Rallón, coautora del estudio y especialista en el IIS-FJD del Hospital Rey Juan Carlos, explica que “la alta prevalencia de infección por VHC en personas con VIH representa un desafío para el sistema inmunológico, ya que ambos virus agravan las consecuencias clínicas del otro”. Según Rallón, el VHC establece una infección crónica en la mayoría de los casos, aumentando las complicaciones en estos pacientes.

La infección con VHC es muy frecuente en la población de personas que viven con VIH, y la presencia de ambos virus en el mismo paciente aumenta la incidencia de morbilidades e incluso de la mortalidad en esta población

Asimismo, el Dr. José Miguel Benito, investigador del mismo equipo del IIS-FJD/UAM en el Rey Juan Carlos, recuerda que en España la vía de transmisión del VIH y VHC predominante en los años 80 y 90 fue la parenteral, principalmente entre consumidores de drogas intravenosas. “Esto hizo que un elevado porcentaje de infectados por VIH también contrajeran el VHC”, apunta.

Los antivirales de acción directa, un cambio de escenario

La Dra. Álvarez subraya que hasta hace unos años los escasos fármacos disponibles para enfrentarnos al VHC eran poco eficaces, tóxicos y mal tolerados, ya que su mecanismo de acción se basaba en tratar de orquestar al sistema inmunológico para conseguir la eliminación del virus, lo que se conseguía solamente en la mitad de los casos. “Para optar a un 50% de posibilidades de curación había que completar un año de efectos secundarios y toxicidad para el organismo”, comenta.

Desde el año 2015, en cambio, se dispone de unos nuevos fármacos que han revolucionado la historia natural de la hepatitis C: los fármacos antivirales que actúan directamente sobre la replicación del virus (AADs) alcanzando, tan solo en 2 o 3 meses, una tasa de éxito muy elevada (98,2%, según datos del IIS-FJD/UAM), menos efectos secundarios, y excelente tolerancia “En esta última década este avance ha cambiado por completo el escenario de la hepatitis C, convirtiéndola en una enfermedad con altas expectativas de ser erradicable”, subraya la Dra. Álvarez.

Dra. Álvarez: “Los fármacos antivirales de acción directa han cambiado por completo el escenario de la hepatitis C, convirtiéndola en una enfermedad con altas expectativas de ser erradicable”

El estudio comparó a 229 pacientes coinfectados con un grupo similar de personas con solo VIH. Los resultados muestran que la eliminación del VHC en coinfectados mejora la supervivencia y reduce significativamente las comorbilidades. La Dra. Álvarez destaca la importancia de detectar la infección de VHC tempranamente y empezar el tratamiento lo antes posible. Esto, sumado a una vida saludable, optimiza el pronóstico de estos pacientes.

Finalmente, la Dra. Rallón pone en valor el trabajo conjunto de su equipo en la Fundación Jiménez Díaz y el Hospital Rey Juan Carlos. “La colaboración entre investigadores clínicos y básicos es esencial para mejorar la calidad de vida de los pacientes, y este estudio es un buen ejemplo de ello”, concluye.

Opinión

Multimedia

Economía

Accede a iSanidad

Síguenos en