Redacción
La SEOM ha destacado el gran potencial de los anticuerpos conjugados dirigidos (ADC) frente al receptor folato-alfa en el tratamiento del cáncer de ovario. Estos avances se han resaltado con motivo del Día Mundial del Cáncer de Ovario, celebrado el 8 de mayo. El receptor de folato-alfa está sobreexpresado en un alto porcentaje de tumores de ovario. Este receptor se ha identificado como una nueva diana terapéutica. Los ADC se suman a los beneficios de los fármacos inhibidores de PARP (iPARP), que han revolucionado el tratamiento del cáncer de ovario avanzado.
Entre los últimos avances, la SEOM destaca el desarrollo de la primera vacuna preventiva contra el cáncer de ovario, llamada ‘OvarianVax’
Entre los últimos avances, la SEOM destaca el desarrollo de la primera vacuna preventiva contra el cáncer de ovario, llamada OvarianVax. Esta vacuna fue anunciada por la Universidad de Oxford en 2024. Aunque aún debe demostrar su eficacia en ensayos clínicos en humanos, está dirigida especialmente a mujeres con mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2.
El tratamiento del cáncer de ovario se basa en cirugía citorreductora para lograr la resección de todo el tumor visible. Se administra quimioterapia con carboplatino y un taxano, habitualmente paclitaxel, antes y/o después de la cirugía. Aunque los resultados del tratamiento primario han mejorado, aproximadamente la mitad de las mujeres tendrán una recaída en los tres primeros años.
Se trata de una enfermedad de mal pronóstico y la principal causa de muerte por tumores malignos ginecológicos. La mayoría de los pacientes se diagnostican en estados avanzados. Según la SEOM, se prevé que este año se diagnostiquen 3.748 casos nuevos de cáncer de ovario en España. La elección del tratamiento a la recaída depende de varios factores. Estos incluyen el tipo tumoral, la duración de la respuesta a la primera línea, las toxicidades presentadas, los agentes utilizados, la situación clínica y las preferencias de la paciente. También depende de la presencia o no de mutaciones en BRCA. La identificación de factores predictores o biomarcadores es vital para ello.
SEOM también menciona otros tratamientos complementarios a la quimioterapia. Estos tratamientos actúan sobre dianas específicas del crecimiento tumoral y han demostrado ser beneficiosos en diferentes escenarios del cáncer de ovario avanzado. Una de estas estrategias es el tratamiento antiangiogénico, representado por bevacizumab, que bloquea la formación de nuevos vasos sanguíneos por el tumor. Todos los avances, aunque pequeños de manera aislada, han cambiado notablemente el pronóstico, la supervivencia y la calidad de vida de muchas pacientes.
Todos los avances, aunque pequeños de manera aislada, han cambiado notablemente el pronóstico, la supervivencia y la calidad de vida de muchas pacientes
Los progresos dirigidos a pacientes con mutaciones en BRCA 1 o BRCA 2 son significativos. Aproximadamente el 20% de las afectadas presentan estas mutaciones. Los fármacos inhibidores de PARP, como olaparib, niraparib y rucaparib, están aprobados en España para la recaída platino sensible de cáncer de ovario. Olaparib y niraparib también están aprobados en el mantenimiento de primera línea tras la quimioterapia. Estos inhibidores de PARP tienen un claro impacto en la supervivencia global de las pacientes.
Durante 2023, se comunicaron datos prometedores de estudios de combinación de iPARP con inmunoterapia y antiangiogénicos. Esta estrategia es especialmente interesante para pacientes sin mutaciones de BRCA o sin déficit de recombinación homóloga. Estas pacientes suelen tener un menor beneficio con los iPARP en monoterapia. Este perfil de pacientes representa el principal reto a vencer en los próximos años.
