..Juan Pablo Ramírez.
..Cristina Cebrián (fotografías y vídeo).
El director general de Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp), Jaume Pey, hace un repaso por el sector con motivo del Día Internacional del Autocuidado, que se celebra hoy. La asociación se encuentra inmersa en multitud de proyectos. Uno de ellos es la incorporación de los medicamentos no sujetos a prescripción médica en las bases de datos de fármacos de las 17 comunidades autónomas. Pey subraya que la interoperabilidad le ha dado un impulso importante. “Tenemos que hacer una base de datos que se pueda comunicar con la que ya tenemos hoy de medicamentos sujetos a receta médica, no sujetos y productos sanitarios de prescripción”, añade.
A finales de 2018 el autocuidado se encontraba en cuotas del 2%. ¿A qué punto nos encontramos en la actualidad? ¿Qué camino queda por recorrer?
Desde 2013 a 2017 experimentamos crecimientos importantísimos que rondaban entre el 6% y el 8% en valores y unidades. A partir de 2017, hemos vivido incrementos más moderados, alrededor del 3%. Lois últimos datos en valor son del 2,8%, aunque es verdad que en volumen el mercado no está creciendo. Si lo comparamos con años anteriores, no tenemos aquellos crecimientos espectaculares pero España cuenta aún con camino para penetrar en autocuidado.
A nosotros nos gusta decir que España es un país emergente en término de autocuidado. Somos sensibles a la evolución a de la economía. Seguimos viendo un futuro muy esperanzador. Incluso este crecimiento del 2,8%, pensamos que en próximos podemos llegar a tasas del 4%, siempre y cuando tengamos una situación económica y un marco político estables.
A nosotros nos gusta decir que España es un país emergente en término de autocuidado
¿Qué sectores de los productos de autocuidado están creciendo más? ¿Cuál puede ser la razón?
Casi un 50% del crecimiento procede del sector OTC. Lo componen los medicamentos no sujetos a receta médica y los complementos alimenticios. Después vendrían a cierta distancia los productos de cuidado personal y cosmética y en tercer lugar productos sanitarios denominados medical devices. Esta categoría de OTC es la que se ha mostrado más dinámica, con un 47% para ser más exactos.
Concretamente en el sector de los complementos alimenticios, ¿cómo se está produciendo este cambio?
Hoy ya los complementos alimenticios suponen poco más del 50% de los productos OTC. Es muy protagonista. La industria del autocuidado está apostando por complementos de calidad y contrastados. Hay que reconocer que la puesta en mercado de un complemento resulta mucho más rápida que un medicamento. Esta rapidez de puesta en mercado qué compañías y consumidores acepten este tipo de productos que inciden en su calidad de vida.
Tenemos una herramienta muy importante que es el sello Anefp. Este sello sustituye para medicamentos no sujetos a receta médica el control previo sanitario (CPS)
Anefp tiene un claro interés por la corregulación. ¿De qué forma se está hablando/colaborando con las CCAA?
En corregulación tenemos una herramienta muy importante que es el sello Anefp. Este sello sustituye para medicamentos no sujetos a receta médica el control previo sanitario (CPS). Es una corregulación porque colaboramos el Ministerio y Anefp. Lo concedemos cada semana. Ya llevamos más de cinco años con más de 4.600 sellos concedidos. Aún no teniendo la obligación de tener que pasar por un proceso así, como industria queremos asegurar que nuestra publicidad es veraz, correcta y adecuada.
Nos hemos dotado de un modelo de corregulación con el Ministerio de Sanidad. Nos gustaría extrapolar este modelo a otros segmentos. También trabajamos en corregulación con las comunidades autónomas. Estas tienen transferidas la transferencia de CPS por ley. Por ejemplo, en Cataluña, donde hay una comisión que evalúa todos los productos de las compañías que tienen su sede en Cataluña, ANEFP tiene un asiento de pleno derecho para evaluar estos proyectos. Con el reto de comunidades, el proyecto de máximo colaboración ahora es el sistema de receta electrónica. Estamos intentando que todos los productos de autocuidado puedan estar en el sistema de receta electrónica
Tienen un acuerdo con el Ministerio de Sanidad sobre una nueva guía de publicidad. ¿Cuál es el objeto de esta guía y en qué punto se encuentra?
La guía ha sido un trabajo muy importante. Aunque no aplica normas nuevas, sí aplica criterios nuevos de interpretación. Esto son muy importantes. Allí donde existían grises de interpretación hemos hecho un trabajo para que clarificarlos. Existen ejemplos. No puede salir un profesional sanitario recomendando un producto, pero puede salir en un spot un farmacéutico dispensando de fondo. No está prohibido.
Nos hemos dotado de un modelo de corregulación con el Ministerio de Sanidad. Nos gustaría extrapolar este modelo a otros segmentos
Es una guía de interpretación en común con el Ministerio de Sanidad. Resulta necesaria porque tenemos una ley de publicidad de medicamentos del año 94. En aquel momento no había mundo digital. Hemos intentando que incorporar un elemento interpretativo de cómo tenemos que tratar la publicidad en el mundo digital. Por este motivo, insistimos en la necesidad de renovar el real de reto de publicidad de medicamentos y productos sanitarios para adaptarlo a los tiempos. Nos consta que el Ministerio está pensando en ello.
¿Cómo van los cursos de formación con SEMG? ¿sobre qué puntos se centra esta formación principalmente?
Aún no son una realidad. Nos encontramos en la fase de prospectiva. Estamos en conversaciones con SEMG para identificar las áreas de formación que el médico de primaria necesita más. Por tanto con este grupos de trabajo pretendemos avanzar en cuáles serían los contenidos. Estamos hablamos de 75.000 productos de autocuidado. Lógicamente, para el médico de primaria un primer elemento muy importante va a ser conocerlos.
Es verdad, que no todos van a ser primarios en su arsenal terapéutico. Estamos seguros de que una primera área va a ser el conocimiento del producto. Pero vamos a intentar también es trabajar por áreas terapéuticas de máximo interés. En la última reunión identificamos de especial relevancia dolor y respiratorio. Probablemente empezaremos con estas áreas pero estamos ahora discutiendo contenidos y plan de acción. Lo vamos a empezar ver a partir de 2020.
Estamos en conversaciones con SEMG para identificar las áreas de formación que el médico de primaria necesita más
De acuerdo con esta base de datos y la colaboración de las sociedades de Atención Primaria, ¿cuáles son los productos que forman parte habitualmente de su arsenal terapéutico?
Lo que tenemos, que por ley está ahí, y la interoperabilidad ha ayudado muchísimo, ya tenemos los medicamentos no sujetos a receta médica en la base de datos entre nueve y 12 comunidades autónomas. Van a estar en todas porque la propia interoperabilidad nos obliga, por ejemplo, a que si la Comunidad de Madrid lo tiene, también lo debe añadir Asturias. En un plazo corto estará en las 17 comunidades autónomas ¿Esto es suficiente? No, porque estamos hablando de 2.000 productos, pero hasta 75.000 hay muchos. Evidentemente, no podemos cargar de golpe los 75.000.
Tenemos que determinar qué es lo que el médico utiliza de forma más habitual en su arsenal terapéutico para que el paciente tenga mayor adherencia y calidad en el tratamiento. Iremos introduciendo estos productos en función de criterios de uso en primaria. La vocación de Anefp es que al final estén todos. Por tanto, necesitamos una base de datos de calidad. Sí que existen bases de datos con todos los productos autocuidado pero necesitamos que sea compatible con los sistemas de prescripción públicos y privados y sobre todo, aparte de ser compatible, que sean accesibles para todos los profesionales sanitarios. Tenemos un proyecto de magnitud importante. No solo es elaborarla, sino actualizarla y tenerla al día.
Sí que existen bases de datos con todos los productos autocuidado pero necesitamos que sea compatible con los sistemas de prescripción públicos y privados
¿Qué plazos manejan para que puedan estar todos los productos?
Tendría que empezar a ser una realidad en 2020. No puedo asegurar que estén los 75.000 productos, lo veo complejo. Tendremos que hacer cargas al principio más selectivas con la vocación de que estén todos. Pero probablemente las autoridades y primaria nos van a pedir primero aquellos productos que suelen utilizar con más frecuencia en su praxis terapéutica. Es probable que los prioricen.
¿Cuáles son las comunidades autónomas más avanzadas?
De las 12 que ya tienen los medicamentos no sujetos a receta médica, ahora irrumpe la receta electrónica privada que para autocuidado resulta también un elemento muy importante. Hay comunidades como Valencia que sí empiezan a presentar productos de autocuidado en su base de datos a petición del profesional, incluso de las compañías. Hay una necesidad porque el nomenclátor no incluye estos productos. Por tanto, tenemos que hacer una base de datos que se pueda comunicar con la que ya tenemos hoy de medicamentos sujetos a receta médica, no sujetos y productos sanitarios de prescripción.