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Imprimir un órgano para implantarlo en pacientes quizás puede sonar a ciencia ficción. Pero es precisamente una de las importantes aplicaciones que la bioimpresión puede trasladar a la medicina del futuro y para la que ya trabajan muchos expertos. Aplicar las técnicas de impresión 3D a materiales biológicos, bioquímicos y células vivas, ese es el objetivo de esta tecnología. No hay duda de que su estabilización, y por ende, generalización, será un cambio de paradigma en varios campos de la medicina; como los ensayos clínicos, la medicina regenerativa y los trasplantes.
El nuevo Informe Anticipando que acaba de publicar la Fundación Instituto Roche se centra en el ámbito de la bioimpresión. El trabajo es coordinado por José Luis Jorcano, profesor del Departamento de Bioingeniería e Ingeniería Aeroespacial de la Universidad Carlos III de Madrid.
El informe indica que la bioimpresión contribuirá al progreso e implementación de la Medicina Personalizada de Precisión
“La aplicación más prometedora en un futuro será la producción de órganos sólidos tales como el corazón, el hígado u otros; pero eso, en el mejor de los casos, será a largo plazo. En el momento actual, estamos en disposición de producir tejidos de estructura sencilla: ahora mismo piel y en un futuro no muy lejano tejidos cilíndricos, tales como uretras y vasos sanguíneos”, explica el profesor Jorcano. No obstante, especifica que la aplicación clínica de estos tejidos llegaría tras numerosos ensayos clínicos de cara a poder ser aprobada por las autoridades sanitarias.
Entre otras conclusiones, el informe indica que la bioimpresión contribuirá al progreso e implementación de la Medicina Personalizada de Precisión.
Al respecto, el Dr. Joaquín Arenas, director del Instituto de Investigación del Hospital Universitario 12 de Octubre (i+12); y miembro del Comité Asesor Observatorio de Tendencias de Medicina Personalizada de Precisión, indica que “las nuevas oportunidades que ofrece la bioimpresión en el campo de la medicina resultarán clave a la hora de definir la medicina del futuro, si bien se enfrenta a retos tecnológicos, éticos y legales que, durante los próximos años, habrán de solventarse para su traslación definitiva a la práctica clínica”.
La tecnología necesaria para la bioimpresión es muy compleja y precisa de la participación de equipos multidisciplinares
“Si bien es cierto que ya ha sido posible generar algunas estructuras con cierto grado de complejidad, estos están aún lejos de poder ser implantados en pacientes. Por el momento se trata de pruebas de concepto”, añade el Dr. Arenas; quien prevé que “probablemente, darán lugar a nuevas estrategias diagnósticas y terapéuticas que configurarán el futuro; tanto de la investigación biomédica como de los posibles tratamientos y aproximaciones a diferentes patologías”.
El profesor Jorcano anticipa que la aplicación que antes llegará a la clínica y a la empresa será el uso de tejidos bioimpresos para el testeo de fármacos y de productos cosméticos y químicos de consumo humano. Ya que su validación por las autoridades competentes es mucho más sencilla. Entre otras ventajas, esto podría reducir la experimentación en animales. También anticipa que estos tejidos para testeos se podrían producir a partir de las células de un paciente. Esto supondría un nuevo abordaje hacia la Medicina Personalizada de Precisión. Jorcano considera que la bioimpresión de tejidos y órganos en investigación permite producir y utilizar material biológico idéntico en cada uno de los ensayos; permitiendo de esta forma estandarizarlos dando lugar a resultados más reproducibles y menos costes de producción.
“La tecnología necesaria para la bioimpresión es muy compleja. Requiere la participación de equipos multidisciplinares compuestos por expertos en Biología, Química, Biomateriales, Ingeniería, Medicina y otras áreas”. Destaca Jorcano. Por ello, desde su punto de vista ve necesario, “tanto mejorar la financiación como el impulso de iniciativas que incentiven la creación de estos equipos”.
Entre los retos a los que se enfrenta la bioimpresión figura garantizar su traslación e incorporación a la práctica clínica
“La bioimpresión es una tecnología en auge que previsiblemente supondrá un cambio de paradigma en numerosos ámbitos de la atención sanitaria y que tiene implicaciones para la Medicina Personalizada de Precisión”. Así lo considera la directora gerente de la Fundación Instituto Roche, Consuelo Martín de Dios. “Su avance plantea, además de complejos desafíos técnicos, múltiples cuestiones legales y aspectos éticos que han de abordarse. Ese es el objetivo de este nuevo Informe Anticipando”, sostiene. A la bioimpresión se sumarán las ciencias ómicas y los datos en la era de la Medicina Personalizada de Precisión; como temas identificados por el Observatorio de tendencias en MPP de la Fundación Instituto Roche como avances disruptivos.
Por su parte, el Dr. Arenas señala los retos a los que se enfrenta la bioimpresión. Entre los que también figura garantizar su traslación e incorporación a la práctica clínica; elaborar estrategias que permitan disminuir los tiempos necesarios y de esta forma favorecer el desarrollo de un tejido como de un órgano.
