..Juan Pablo Ramírez. Director de iSanidad.
Desde hace ya tiempo vienen pidiendo los profesionales al Ministerio de Sanidad diálogo, diálogo y diálogo. Esta reclamación no es nueva y se remonta a antes de que Salvador Illa tomara posesión de la cartera de Sanidad. Cada ministro tiene sus técnicos y presta poca atención a los expertos que ejercen su función fuera del Ministerio. Es un problema que viene de antiguo como si los muros de la sede del Paseo del Prado fueran impermeables a las opiniones de colegios, sindicatos y sociedades científicas.
Esta semana Illa ha recibido a los representantes del Foro Profesional. Ha mantenido una reunión con los responsables de los sindicatos CESM y Satse así como con los presidentes de los consejos generales de médicos y enfermeros. Ambas partes se han emplazado a nuevas reuniones y a mantener el diálogo. La duda siempre de estos encuentros van más allá de las buenas intenciones o existen objetivos concretos.
Desde hace ya tiempo vienen pidiendo los profesionales al Ministerio de Sanidad diálogo, diálogo y diálogo. Esta reclamación no es nueva, es anterior a Illa
La reunión se produjo un día después de que los médicos se manifestaran en la Puerta del Sol contra el Real Decreto 29/2020. Los médicos han realizado una ejercicio de responsabilidad desconvocando la huelga. No obstante, no han dejado de llamar la atención sobre una normativa injusta que equipara a profesionales que carecen de la formación necesaria para desempeñar la medicina. El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (Cgcom) tampoco deja de insistir. Ha acudido al Parlamento Europeo, donde ha presentado una solicitud de investigación por vulneración del derecho de la Unión.
Se trata de acciones que vienen a denunciar esta falta de diálogo, independientemente de una reunión. Escuchar a secas no resulta suficiente. Los médicos y los enfermeros deben ser parte del día a día del Ministerio y de las consejerías de las comunidades autónomas. La última en llamar la atención sobre este problema ha sido Semergen. Precisamente una de las sociedades que más tiene que decir en un momento marcado por las reformas que requiere atención primaria lanza esta queja. No hay justificación. La pandemia debe cambiar esto. Las administraciones deben estrechar lazos con los profesionales y pacientes y hacerles partícipes de las toma de decisiones. Si no, saldremos de esta crisis todavía en peores condiciones.