..Gema Maldonado.
No ha sido un viernes cualquiera, de los de oficinistas deseando fichar salida a las 15:00 horas y atascos para escapar de las ciudades en busca de un fin de semana de pueblo o de primeros paseos de la temporada en las costas. Ha sido el primero de, quizá, unos cuantos viernes de sofá y ordenador, de hospital o de trabajo sin tregua. Cada uno, en su propia lucha contra el coronavirus. Este viernes ha dejado imágenes como las de sanitarios del Hospital de Getafe haciendo un tutorial en vídeo sobre cómo fabricarse un delantal protector con bolsas de plástico. Y otras de silencio. Las de los sanitarios del hospital de Galdakao en recuerdo de su compañera fallecida por coronavirus.
El ministro Salvador Illa insiste en que se están repartiendo mascarillas allí donde hacen falta pero la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se queja de que son insuficientes. Estima en casi 14 millones las mascarillas que necesitarán los hospitales madrileños en los próximos 20 días y anuncia que “nos vamos a poner a todo tren a fabricar material para el personal sanitario”, después de que el ministro asegurara que las comunidades también pueden comprar mascarillas y otros productos.
Este viernes hemos visto a sanitarios haciéndose mandiles frente al coronavirus y a otros en silencio por su compañera fallecida
No es el único frente abierto del Gobierno con presidentes autonómicos. La ministra de Defensa, Margarita Robles, respondía a las declaraciones del presidente de la Generalitat, Quim Torra, que en una entrevista para la BBC volvía a hacer hincapié en que Sánchez le había quitado las competencias y no confinaba a la gente en sus casas. “No vale todo y en estos momentos el señor Torra, quizá por su situación personal y la condena que tiene, está en una fuga hacia adelante”, así respondía la ministra en una entrevista en RNE.
Pero bajando a la realidad de la gente corriente, más allá de enfrentamientos políticos en medio de una crisis sanitaria sin precedentes, el coronavirus genera preocupación por sus repercusiones en la salud, pero también en la economía. Según un estudio de la consultora 40dB para El País, la mitad de los españoles tiene miedo a perder su trabajo y seis de cada diez cree que su sueldo va a bajar por esta pandemia. El estudio también muestra que estamos siendo disciplinados en el cumplimiento de las medidas que establece el real decreto de estado de alarma. Casi el 70% asegura que cumple plenamente las medidas y casi un 17% que las cumple casi al completo.
La mitad de los españoles tiene miedo a perder su trabajo y seis de cada diez cree que su sueldo va a bajar por esta pandemia
Este viernes también nos ha dejado una muestra más de solidaridad y de cómo particulares y algunas empresas se vuelcan en esta crisis. Así, la fábrica de ron Arehucas, ubicada en el municipio grancanario de Arucas, reconvierte su producción y destilará alcohol para producir hidrogeles y alcohol sanitario. O la iniciativa Delivery for Heroes puesta en marcha por un grupo de empresas de restauración catalanas que ya han empazado a repartir más de 200 comidas preparadas para el personal sanitario de diferentes hospitales de Barcelona. Una iniciativa que se une a Food 4 Heroes, creada unos días antes en Madrid y de la que forman parte numerosas cadenas de restauración.
Quizá sea la empatía y la capacidad de ayuda una de las claves que, junto con la ciencia, nos permitan superar esta crisis más pronto que tarde. Por si se alarga la situación, las enfermeras y auxiliares de La Paz, además de trabajar sin descanso, optan por entonar a las puertas de Urgencias el que ya se ha convertido en uno de los himnos de estos días. Se lanzan con coreografía incluida con Resistiré. Pues eso. Resistiremos.
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