Dr. Julián Álvarez: “Por desgracia, la mayoría de la población tiene una microbiota bastante dañada”

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..J.P.R.
..P.M./V.G./A.G.B. (Fotografía y vídeo)
El uso de probióticos y prebióticos podría ser la solución a un problema cada vez más común en las sociedades occidentales. “Por desgracia, la mayoría de la población tiene una microbiota bastante dañada“, explica el Dr. Julián Álvarez, médico especialista en medicina deportiva, nutricionista y miembro del Consejo Asesor Nutricional de Herbalife Nutrition, durante un coloquio organizado por iSanidad.

En este entorno en que “la población general occidental tiene una debilidad y vulnerabilidad de las especies microbianas que deben poblar nuestro aparato digestivo y en conjunto todas las cavidades abiertas“, la Dra. Clotilde Vázquez, jefa del Departamento de Nutrición y Endocrinología del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, destaca que el consumo de prebióticos y probióticos “podría ayudar a mejorar la salud de la microbiota“. El reto en el futuro es encontrar “probióticos específicos para un  determinado logro terapéutico“, añade la especialista.

Los prebióticos y los probióticos pueden ser una solución a un problema de gran parte de la población con una microbiota bastante dañada

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Dra. Clotilde Vázquez

El Dr. Álvarez compara la microbiota con un ecosistema o con un bosque. “Habría que repoblarlo. La dificultad está en encontrar qué plantas son las adecuadas. Los prebióticos también  son los abonos para poder tener ese bosque. Pero lo que está claro hoy en día es que la microbiota es un elemento fundamental para la salud“. El experto advierte que es un problema al que hasta ahora no se había atendido, “salvo cuando daban al paciente una cantidad significativa de antibióticos“.

Mientras las investigaciones sobre la microbiota avanzan, la Dra. Vázquez pone en valor su importancia. “Contamos con unos 20.000 o 25.000 genes en nuestras células. Y tenemos más de tres millones de genes en los microorganismos que nos pueblan. No podía ser que una cantidad de elementos de organismos dentro de nosotros fueran una cosa banal“, subraya.

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Dr. Julián Álvarez

Esta diversidad complica la capacidad para “repoblarla“, hecho que se suma a la dificultad de realizar un diagnóstico y al problema de la contaminación. Por un lado, la Dra. Vázquez advierte que el “medio ambiente está bastante estéril. Tenemos pesticidas y antibióticos en las aguas residuales. Por tanto, nuestra flora intestinal la cuidamos muy bien o se empobrece. En lugar de un bosque va a parecer un jardín de las afueras de una gran ciudad con cuatro arbolitos“, subraya.

Por otro, el Dr. Álvarez incide en las trabas para la detección de problemas en la microbiota. “Todavía no sabemos al 100% qué significa tener una microbiota sana, pero sí cuando la microbiota se encuentra relativamente insana. Sabemos que ya determinadas cepas de microorganismos nos pueden ayudar a restituir, por lo menos, la base del césped de ese jardín“, subraya. En este contexto, la Dra. Vázquez incide en una alimentación saludable. El consumo de frutas y verduras “es la mejor forma de prevenir los trastornos de la microbiota intestinal“.

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