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Salvador Illa cuando estaba al frente del Ministerio de Sanidad anunció un megacontrato para la compra de material sanitario. En total se presupuestaron más de 2.500 millones. Según datos publicados por el digital Vozpopuli, finalmente solo se han ejecutado 9,7 millones, es decir, el 0,45%. Se trata de información compartida por el Ingesa, a través de una solicitud remitida al Buzón de Transparencia.
El Gobierno aprobó en septiembre de 2020 un megacontrato para la adquisición de material sanitario y equipos de protección individual. Estaban destinados al Sistema Nacional de Salud y disponibles para otras instituciones por 2.578,7 millones euros, el objetivo eran 3.700 millones de unidades de productos. La finalidad era dotar a los organismos públicos (comunidades, ayuntamientos, ministerios…) de un acceso rápido al material a través de una compra centralizada. Se trataba se material básico como mascarillas, guantes, gafas, batas…
Salvador Illa anunció un megacontrato para la compra de material sanitario que estuvo rodeado de polémica desde su lanzamiento
El objetivo de esta compra centralizada era un ahorro de 300 millones de euros para las arcas del Estado. “Esta tramitación es la única opción posible para conseguir en un corto espacio de tiempo disponer, por parte del Servicio Nacional de Salud, del material necesario para hacer frente a cualquier eventualidad”, señaló el Gobierno. Las comunidades podían realizar contratos basados en este acuerdo marco en función de sus necesidades específicas. Mejoraban su tramitación porque no era que realizar ninguna licitación suplementaria.
Falta de confianza de las comunidades
Ya la tramitación tuvo mucha polémica, hasta el punto de que el Ministerio anuló el concurso poco después de convocarlo. Se tuvieron que rehacer los pliegos porque las exigencias previas limitaban el acceso a muchas empresas españolas. Finalmente se presentaron 155 empresas, pero solo 72 fueron seleccionadas.
Las comunidades autónomas prescindieron de esta posibilidad realizando las compras por su cuenta. Las empresas seleccionadas no tenían obligación de tener stock para abastecer la reserva estratégica. El acuerdo marco aseguraba oferas de productos y precios pactados, pero no aprovisionamiento.
Precios por encima de mercado antes de la pandemia y empresas desconocidas entre las razones del fiasco
Los contratos del Ministerio de Sanidad tenían precios muy por encima de los valores de mercado que había antes de la pandemia. Además, dependían de empresas que eran desconocidas en el sector sanitario o ignoraban los canales oficiales, como las Cámaras de Comercio de España en China.
Uno de los ejemplos fue la empresa de confianza del Ejecutivo, Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas. Esta pequeña sociedad de Zaragoza, pasó de tener una cifra de ingresos de 0 euros en 2019 a 53,13 millones en 2020. El Ministerio de Transportes, dirigido entonces por José Luis Ábalos, la eligió para suministrar mascarillas.
