..Cristina Cebrián.
El trabajo multisectorial e internacional y la colaboración público-privada son claves para superar los nuevos retos que plantea la investigación biomédica. Además, un sistema sanitario de calidad necesita tener una base investigadora. Así se puso de manifiesto durante la XV Conferencia Anual de las Plataformas Tecnológicas de Investigación Biomédica, que impulsa la Plataforma Tecnológica Española de Medicamentos Innovadores de Farmaindustria en colaboración con Fenin, Asebio, Veterindustria y Nanomed.
Amelia Martín, directora asociada de Investigación clínica y traslacional de Farmaindustria, destacó que en España “contamos con una muy buena posición en el ámbito de la investigación biomédica. Esto es fruto del trabajo colaborativo desde hace muchos años entre todos los agentes implicados. De hecho, nuestros centros españoles participan en 3 de cada 10 ensayos europeos”.
Amelia Martín (Farmaindustria): “El reglamento europeo exige más agilidad en los tiempos de aprobación de ensayos. Hay que dotar de más recursos a los organismos encargados de realizar esa evaluación”
Un dato que supone un gran avance ya que la participación en un ensayo clínico conlleva una fuente de ingresos y ahorros para el Sistema Nacional de Salud (SNS). Sin embargo, uno de los retos que debe afrontar la investigación biomédica es que “el reglamento europeo exige más agilidad en los tiempos de aprobación de ensayos y, por tanto, hay que dotar de más recursos a los organismos encargados de realizar esa evaluación”, explicó Martín.
Por otro lado, la tecnología sanitaria también desempeña una labor fundamental para la mejora de la investigación biomédica. En este sentido, la secretaria general de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin), Margarita Alfonsel, recordó que “en Fenin ponemos el foco en el papel transformador de nuestra industria en la construcción de un nuevo modelo y conceptualización de la salud que ha de girar en torno a la economía del dato. Nuestro objetivo es generar datos de calidad para medir de manera más eficiente, y no sólo a nivel de servicios, sino también a nivel de procesos”.
Para conseguir que todo este trabajo tenga un impacto real en los pacientes y en el sistema sanitario, “es necesario impulsar el emprendimiento y los sistemas de co-creación. La fórmula más efectiva de trabajo para alcanzar valor es trabajar conjuntamente con la administración”, aseguró Alfonsel.
Ion Arocena (Asebio): “Con instrumentos como el proyecto estratégico Salud de Vanguardia, tenemos una oportunidad extraordinaria para modernizar nuestro sistema de investigación biomédica”
Poder transformador de la colaboración
Por su parte, Ion Arocena, director general de la Asociación Española de Bioempresas (Asebio), destacó la importancia del Perte sanitario aprobado por el Gobierno y el valor de la colaboración multisectorial. “La pandemia ha evidenciado el poder transformador de la colaboración. Ahora, con instrumentos como el proyecto estratégico Salud de Vanguardia, tenemos una oportunidad extraordinaria para modernizar nuestro sistema de investigación biomédica; dejando atrás los modelos de transferencia de tipo lineal y caminar hacia verdaderos modelos colaborativos”, comentó.
Sin duda, la pandemia de Covid-19 ha representado un antes y un después en el ámbito de la investigación biomédica. Además del esfuerzo y compromiso de los profesionales sanitarios, destaca la capacidad de trabajo de los agentes implicados en la investigación biomédica.
Josep Samitier (Nanomed): “Gracias a la investigación en nanomedicina, hoy en día tenemos vacunas basadas en el ARN mensajero”
De hecho, según Josep Samitier, coordinador científico de Nanomed Spain y director del Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC), “gracias a la investigación en nanomedicina, hoy en día tenemos vacunas basadas en el ARN mensajero (ARNm). Hasta ahora la nanomedicina había logrado mejorar algunos aspectos con fármacos ya conocidos, mejorando la farmacocinética. Pero, ahora, nos ha abierto nuevas vías como en el ámbito de la inmunología”.
Por último, para el sector de la salud animal también es fundamental la colaboración intersectorial “dado que las enfermedades no conocen fronteras ni idiomas”, explicó Santiago de Andrés, director general de Veterindustria. Además, el Covid-19 y las resistencias a los antimicrobianos “nos han demostrado una vez más que existe una sola salud”, añadió. No hay que olvidar que el 60% de los patógenos que afectan a humanos son de origen animal; y el 75% de las enfermedades emergentes son zoonósicas, según indica la Organización Mundial de Sanidad Animal.
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