Desarrollan un conjunto de pautas interdisciplinarias para optimizar el tratamiento de la artritis de la mandíbula en niños

Alrededor de 1.500 niños en Dinamarca tienen un diagnóstico de artritis juvenil, que a menudo resulta en una inflamación de la articulación de la mandíbula. Como consecuencia provoca dolor, reducción de la función articular y alteración del crecimiento de la cara. Esto en casos graves puede provocar apnea del sueño y la necesidad de un tratamiento quirúrgico de la mandíbula del paciente.

Las nuevas pautas interdisciplinarias tienen un enfoque especial en el diagnóstico temprano y la detección de la artritis de mandíbula

Hasta este momento ha resultado difícil encontrar un tratamiento eficaz para la artritis de la mandíbula. Se trata de una articulación complicada y el tratamiento óptimo requiere la participación de muchos grupos diferentes de profesionales. En concreto, médicos, incluidos radiólogos, reumatólogos pediátricos, fisioterapeutas, cirujanos maxilofaciales y ortodoncistas. Un grupo de expertos de estas disciplinas ha establecido recomendaciones y pautas comunes para el tratamiento colaborativo interdisciplinario de la artritis de la mandíbula.

“Los sistemas de salud están organizados de diferentes maneras en todo el mundo y, por lo tanto, los tratamientos ofrecidos han sido un poco aleatorios. Ahora, se han elaborado pautas para una colaboración óptima en el tratamiento de esta afección, que pueden guiar el tratamiento de cada paciente, pero también ayudar a los sistemas de salud a organizarse de tal manera que sea posible este enfoque interdisciplinario del tratamiento”, explica Peter Stoustrup.

Gracias a estas nuevas recomendaciones, será más fácil establecer centros que practiquen un tratamiento multidisciplinario para niños y jóvenes con artritis de la mandíbula, según Peter Stoustrup

Las nuevas recomendaciones y guías se basan en el conocimiento y la evidencia disponible en el área. El estudio en el que se basan las pautas proporciona una base para el trabajo de investigación e información de seguimiento, y las pautas se revisarán a medida que se disponga de nuevos conocimientos. Gracias a estas nuevas recomendaciones, Peter Stoustrup afirma que será más fácil establecer centros que practiquen un tratamiento multidisciplinario para niños y jóvenes con artritis de la mandíbula.

Esto será particularmente valioso para los pacientes en países sin seguro médico público como Estados Unidos. “Tenemos a bordo centros como el Boston Children’s Hospital y hospitales en Atlanta y Calgary, que están implementando el enfoque organizacional e interdisciplinario para este tratamiento que estamos proponiendo. Esperamos que esto pueda servir de inspiración para otros centros“, concluye.