Facilitar el acompañamiento, nuestra razón de ser

Jose Antonio García, director de la Fundación Infantil Ronald McDonald

McDonald

Jose Antonio García, director de la Fundación Infantil Ronald McDonald
Los pacientes pediátricos con cáncer y sus familias, encuentran en las Casas Ronald McDonald el acompañamiento que de otra forma en un piso o en un hotel no encontrarían. En un alojamiento individual las familias deben afrontar la enfermedad solas, sin el apoyo de otros padres que están pasando por esas mismas circunstancias y además sus hijos se encuentran sin el ocio y entretenimiento que implica estar en una Casa Ronald McDonald. 

La Fundación Infantil Ronald McDonald es una entidad sin ánimo de lucro e independiente, creada en España en 1997. Desde hace más de 25 años somos un referente en la creación de programas que ofrecen bienestar y apoyo a las familias con hijos e hijas gravemente enfermos.

Las Casas y Salas Ronald McDonald crean un entorno donde el niño puede llevar una vida normalizada, mientras recibe su tratamiento médico; “un hogar fuera de su hogar” 

“Aquí podemos hacer una vida relativamente normal, mientras ella convive con más niños, juega con ellos. La Casa supone seguir de alguna forma con la infancia que, por edad, tendría que estar viviendo”. Son las palabras de la madre de una paciente de 11 años con cáncer alojada en una Casa Ronald McDonald. La familia se ha trasladado desde otra provincia a Madrid para que su hija reciba tratamiento médico especializado a causa de un tumor cerebral. En la Casa vivirán de forma gratuita todo el tiempo que haga falta y a escasos metros del hospital donde su hija recibe el tratamiento especializado.

La finalidad de nuestras Casas y Salas Ronald McDonald es crear un entorno donde el niño pueda llevar una vida normalizada, mientras recibe su tratamiento médico. Creamos “Un hogar fuera de su hogar” para familias con niños gravemente enfermos porque para los niños tener a sus padres cerca, es una parte fundamental que influye en su recuperación.

En nuestros programas, se forman grupos espontáneos de apoyo entre las familias, pues la convivencia y el compartir diariamente los avances de las enfermedades implica un desahogo y un apoyo entre padres y madres. La cocina, el salón y las zonas de juego se convierten de forma natural en los espacios idóneos para charlar, apoyarse mutuamente y forjar grandes amistades.

Las familias en las Casas Ronald McDonald reducen su nivel estrés, mejoran su percepción de la experiencia hospitalaria, la cercanía al hospital les confiere seguridad y mejoran su calidad del sueño

Actualmente el 31% de los casos que atendemos en nuestras Casas de España (Barcelona, Málaga, Valencia y Madrid) son pacientes oncológicos. El papel fundamental de estos recursos para estos niños son por una parte la proximidad al hospital, la posibilidad de mantener a la familia unida y el dedicar todo el tiempo al enfermo despreocupándose de los aspectos logísticos.

En la Casas respetamos la intimidad de las familias, pero a la vez los animamos a compartir y participar con sus hijos en las actividades que diariamente se organizan para entretener a los más pequeños. Manualidades, pastelería, y fiestas son algunas de las actividades organizadas por nuestros voluntarios que dedican su tiempo con la mejor de sus sonrisas.

Según la madre de una paciente, en las casas pueden hacer una vida relativamente normal, mientras su hija convive con más niños y juega con ellos, siguiendo con la infancia que, por edad, tendría que estar viviendo

Así, las familias en las Casas Ronald McDonald reducen su nivel estrés, su percepción de la experiencia hospitalaria mejora, la cercanía al hospital les confiere seguridad y mejoran su calidad del sueño permitiéndoles desarrollar habilidades para hacer frente a la enfermedad mejor. Y todo ello bajo el modelo Family Centered Care (Cuidado centrado en la familia), filosofía que otorga el más alto valor a la atención médica proporcionada en el contexto de las fortalezas y necesidades del paciente, su familia y su comunidad. Es también un modelo de cuidado infantil, en el que el paciente y los miembros de su familia están completamente involucrados -junto al equipo de atención medica- para tomar decisiones informadas sobre el cuidado médico y los servicios de apoyo que el niño y su familia reciben.

Durante el año 2022 la Fundación Infantil Ronald McDonald ofreció alojamiento gratuito a cerca de 4.000 personas con una media de estancia de 25 días, se tratan 877 niños enfermos, permitiendo que 314 hermanos puedan acompañar a lo largo de este proceso al paciente.

Eunice Blanco: “Uno de los derechos de los niños hospitalizados desde la OMS o la Asociación de Pediatría, es que el niño puede y debe de estar con su familia, porque es su primera acogida y su fuente de energía”

Pero las Casas no podrían subsistir sin el apoyo de los equipos médicos y trabajadores sociales hospitalarios, quienes creen fervientemente en que un niño con cáncer debe de estar acompañado por su familia y por otros pacientes semejantes a él. En palabras de Eunice Blanco, jefa de Trabajo Social del Hospital Vall d’Hebron, “es imprescindible que la familia se sienta acompañada en todos los aspectos. Cuando una familia está hospitalizada el ambiente y las circunstancias de incertidumbre ante la enfermedad y su desarrollo es realmente duro. Ante esa situación es importante facilitarles la vida y hacer que se sientan acompañados, no sólo es un alojamiento, se sienten de verdad como en casa. Para el hospital es un recurso imprescindible. Uno de los derechos de los niños hospitalizados desde la OMS o la Asociación de Pediatría, es que el niño puede y debe de estar con su familia, porque es su primera acogida y su fuente de energía. El niño no entiende porque tiene que estar en el hospital, pero debe de estar con su familia. Con lo cual es imprescindible que haya recursos que puedan facilitar realmente que esa conexión familiar no se rompa, que bastante dura es la enfermedad”.

Durante el año 2022 la Fundación Infantil Ronald McDonald ha ofrecido alojamiento gratuito a cerca de 4.000 personas con una media de estancia de 25 días, se tratan 877 niños enfermos, permitiendo que 314 hermanos puedan acompañar a lo largo de este proceso al paciente.

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