Redacción
Las enfermedades reumáticas están marcadas por los determinantes sociales de la salud y afectan a más de 11 millones de personas en España. “A pesar de su alta prevalencia, existe una falta de especialistas de reumatología en nuestro país que hace que se produzcan situaciones de inequidad en los accesos a servicios sanitarios, dando lugar a que en algunas zonas no se lleve a cabo un adecuado manejo de las personas con estas patologías”, han lamentado desde la Sociedad Española de Reumatología (SER). Una situación que, si no se pone remedio, podría agravarse en los próximos años debido a las jubilaciones de la generación baby-boom. “Estamos trabajando para lograr la creación de más plazas de médico interno residente (MIR) en reumatología que puedan suplir el déficit actual y futuro”, ha señalado Dra. Susana Romero, vicepresidenta de la SER.
Según ha asegurado se trata de un “reto importante“, puesto que “durante los próximos 15 años se necesitará aumentar las plazas MIR de reumatología alrededor de un 40% para hacer frente a las crecientes necesidades”. La vicepresidenta de la SER ha sido coordinadora, junto con los Dres. Sagrario Bustabad, Delia Reina y José A. Román, de la Reunión SER de Planificación Estratégica en Reumatología para jefaturas de Servicio/Sección/Unidad, celebrada los días 10 y 11 de febrero.
A pesar de la alta prevalencia de las enfermedades reumáticas, existe una “falta de especialistas de reumatología en nuestro país”. Esto hace que se produzcan situaciones de inequidad en los accesos a servicios sanitarios
Las enfermedades reumáticas, si no se abordan adecuadamente, suponen un alto coste físico, emocional y económico para la persona que las sufre, así como para su entorno familiar y laboral. Al mismo tiempo, tienen un impacto importante en el consumo de recursos, en la sociedad española y el Sistema Nacional de Salud. Por ello, los especialistas han coincidido en la necesidad de trabajar con las administraciones públicas para intentar paliar las inequidades sociales en la salud. “Solo de esta forma se podrá conseguir la mejor atención para los pacientes reumáticos mejorando su calidad de vida, utilizando de manera eficiente los recursos sanitarios y velando por la estabilidad y continuidad del Sistema Público de Salud”, han señalado desde la SER.
El Ministerio de Sanidad, tal y como figura en el programa formativo oficial, reconoce al reumatólogo como el especialista cualificado en su periodo de formación MIR en el manejo de enfermedades musculoesqueléticas y autoinmunes sistémicas. Por tanto, su formación garantiza una asistencia de calidad y la seguridad del paciente. Al mismo tiempo le otorga un rol integrador en su coordinación con atención primaria, que redunda en una mayor eficiencia asistencial. “Un diagnóstico precoz que favorezca un tratamiento temprano resulta clave para reducir daños e incapacidades en estos pacientes”. Así lo ha recordado la Dra. Delia Reina, que también es jefe del Servicio de Reumatología del Hospital de Sant Joan Despí Moisès Broggi de Barcelona.
La tasa de especialistas en reumatología por 100.000 habitantes en España es de 2,1711, muy inferior a la recomendada por la OMS
Para el correcto abordaje de las enfermedades reumáticas, y con el fin de evitar el impacto que supone sobre los pacientes, su entorno y el consumo de recursos, se precisan consultas ágiles y disponer del número de especialistas recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, la Dra. Reina ha afirmado que “no hay suficientes especialistas en reumatología”. Según el estudio Realidad de la reumatología en España y sus comunidades autónomas antes de la pandemia, la tasa de especialistas en reumatología por 100.000 habitantes en España es de 2,1711, muy inferior a la recomendada por la OMS.
Ante el devenir demográfico que se dibuja en España, la labor y recursos disponibles del especialista de reumatología son esenciales para hacer frente al progresivo aumento de la incidencia de estas enfermedades. En este contexto, “es fundamental que la adecuación de la ratio de reumatólogos por habitante evolucione en consonancia con la variable demográfica y las necesidades de la población”, ha insistido la Dra. Susana Romero, ya que, “una adecuación correcta permitirá garantizar una asistencia de calidad y la seguridad del paciente”.
La vicepresidenta de la SER ha subrayado que, de esta manera, se podrá “favorecer la detección precoz de las enfermedades musculoesqueléticas y autoinmunes sistémicas para disminuir el daño, evitar la incapacidad y mejorar notablemente la calidad de vida de estos pacientes, disminuyendo la repercusión en su entorno familiar, laboral y social y en el Sistema Nacional de Salud”.