Victoria Guillén
En España, la prevalencia de obesidad infantil y juvenil es de un 14,2%, una de las más altas de Europa. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que el sobrepeso afecta a 4 de cada 10 niños y a 3 de cada 10 adolescentes en nuestro país. Además, según la última Encuesta Europea de Salud en España del 2020 del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 28% de los niños y jóvenes de entre 2 y 17 años padece obesidad o sobrepeso, estimado que hay más de 2 millones de niños en esa situación. Para frenar el preocupante aumento de casos producidos en los últimos años, el Hospital Quironsalud Sur cuenta con una consulta de salud cardiovascular para niños y adolescentes: el Programa Escolar de Salud Cardiovascular (PESCA).
Se trata de una herramienta de prevención, detección, diagnóstico y manejo tanto del exceso de peso infantil, como de otros factores de riesgo cardiovascular en la etapa infanto-juvenil.
El sobrepeso afecta a 4 de cada 10 niños y a 3 de cada 10 adolescentes en España, según la OMS
“El programa PESCA aporta mayores elementos que la consulta habitual a la hora de diagnosticar y establecer el tratamiento. La consulta está basada en un protocolo fruto de la colaboración entre el Grupo Imfine de Investigación de la Universidad Politécnica de Madrid y otras entidades científicas y clínicas de prestigio”, ha explicado el Dr. Fernando Zárate Osuna, coordinador del programa PESCA del Hospital Quironsalud Sur, en Doryos, una plataforma de conocimiento médico hecha por y para médicos.
Así, la consulta tiene como objetivo la prevención, el diagnóstico y el manejo del riesgo cardiovascular en la etapa infantil y juvenil, de 7 a 17 años. De esta forma, la evaluación de obesidad y sobrepeso, de la condición física y rendimiento deportivo, el asesoramiento nutricional, la prescripción de actividad física y la educación en salud, forman parte del protocolo.
Para realizar una adecuada atención de los pacientes, el Programa PESCA cuenta con tres elementos que conforman la consulta. En primer lugar, el Índice de Masa Corporal (IMC). “El diagnóstico antropométrico que permite saber si existe una clínica de bajo peso, sobrepeso, normopeso u obesidad. Es el índice más utilizado por pediatras y clínicos para diagnosticar esta patología”, ha destacado el especialista. En segundo lugar, se encuentra la Biodependencia de Composición Corporal (BIA). Según el Dr. Zárate Osuna, “esta prueba permite completar el diagnóstico por IMC, permitiéndonos un diagnóstico de mayor precisión. Obtenemos tanto el porcentaje de grasa corporal (adiposidad) como la proporción de músculo y agua corporales”.
El Índice de Masa Corporal, la Biodependencia de Composición Corporal y la Dinamometría de mano, principales elementos que conforman el programa PESCA
Por último, la Dinamometría de mano (DIN). Se trata de una prueba muy sencilla de medición de fuerza, a través de una resistencia, que permite obtener un diagnóstico de la condición física global del niño o adolescente. “Está demostrado que niños que puntúan por debajo del percentil 25 en dinamometría de mano conllevan un mayor riesgo cardiovascular”, ha afirmado el Dr. Zárate Osuna
Una vez evaluados estos tres componentes clínicos, cada niño/a o adolescente obtiene un triple diagnóstico y una guía de recomendaciones individualizadas en cuanto a actividad física y hábitos alimenticios para optimizar y monitorizar su salud cardiovascular. “Gracias al programa hemos conseguido mejorar la prevalencia de sobrepeso y obesidad en la población infanto-juvenil”, ha concluido.
Doryos
Doryos es una plataforma digital de conocimiento médico hecha por y para médicos. De todas las especialidades, desde un estudiante a un médico senior con diferentes formatos siempre audiovisuales, ágiles y atractivos. Liderado por médicos, impulsado por instituciones del sector sanitario y con un comité editorial que vela por la calidad de los contenidos.