Cristina Cebrián
“A todos nos gusta estar en nuestra casa cuando no estamos bien”. Con esta afirmación, el Dr. Antoni Serrano, director de la Red de Salud Mental del Parc Sanitari Sant Joan de Déu, explica los beneficios de establecer un modelo comunitario en el área de la salud mental. La integración de estas personas en la sociedad es fundamental para su bienestar y desarrollo. En este sentido, los modelos comunitarios facilitan la recuperación de la persona y evitan su “desnaturalización”.
Además, es clave la participación de profesionales sanitarios de diferentes disciplinas, no solo psiquiatras y psicólogos. El Dr. Serrano pone de ejemplo a Cataluña, ya que disponen de un sistema de cooperación entre la red de atención primaria y la red de Salud Mental para fomentar el abordaje de las personas según su nivel de gravedad y complejidad.
¿Qué beneficios aporta establecer un modelo comunitario en salud mental?
El modelo comunitario permite mantener aquello que nos hace humanos, la socialización e integración en nuestro espacio natural. Esto implica sobre todo a la familia y entorno próximo, que mantienen la relación y participan de la recuperación de la persona. Por lo tanto, el modelo comunitario evita la desnaturalización de las personas que sufren cuando son institucionalizadas y sus efectos negativos. En definitiva, a todos nos gusta estar en nuestra casa cuando no estamos bien.
El modelo comunitario está constituido por un amplio grupo de profesionales de diferentes disciplinas que intervienen con diferente intensidad
¿Qué recursos, humanos y materiales, deben incluir esos modelos comunitarios?
El modelo comunitario está constituido por un amplio grupo de profesionales de diferentes disciplinas que intervienen con diferente intensidad. Todo el mundo piensa rápidamente en el psiquiatra, psicólogo, enfermero y trabajador social clásicos que te atienden en su despacho. Pero existen otros profesionales, como los insertores laborales, los integradores sociales, los terapeutas ocupacionales, los educadores sociales, los gestores de casos, los PSI (Plan de Servicios Individualizados) y otros que también participan en la atención comunitaria.
Los gestores de casos son los profesionales del Plan de Servicios Individualizados (PSI), un programa de atención de proximidad a personas con un diagnóstico de trastorno mental severo y que, por sus circunstancias, no acaban de establecer un vínculo satisfactorio o suficiente con los servicios sanitarios y sociales. La finalidad es conseguir la continuidad asistencial y la máxima recuperación y mejora de la calidad de vida en la comunidad, llevando a cabo la atención allá donde es la persona: a casa, en la calle o en los diferentes espacios comunitarios.
¿Por qué es importante llevar a cabo un abordaje multidisciplinar de las personas con trastornos mentales?
Las necesidades de las personas que tienen trastornos mentales son diversas y complejas, por lo que no existe un único perfil que pueda cubrirlas todas. Es preciso realizar una evaluación completa para decidir qué abordaje se ofrece.
El sistema sanitario no puede abordar por sí mismo la complejidad de los trastornos mentales graves más complejos en la comunidad
¿Está preparado nuestro sistema sanitario para implantar este modelo comunitario? ¿Qué se necesita para mejorarlo?
Ya existe un modelo de atención comunitaria que atiende a personas con trastornos mentales, como mínimo en Cataluña. Sin embargo, el sistema sanitario no puede abordar por sí mismo la complejidad de los trastornos mentales graves más complejos en la comunidad. Esto sin tener en cuenta que algunas de estas personas son de especial vulnerabilidad por su falta de recursos económicos, su comorbilidad por uso de sustancias tóxicas o discapacidad intelectual, su edad, su especial discapacidad, su condición de migrantes o de población sin techo.
Para estas personas hay que movilizar recursos adicionales tanto del sistema sanitario como social. Esto complica más la atención y sólo las instituciones realmente integradas podrán dar respuesta y atención integral con continuidad asistencial, que abarque todos los ámbitos de la vida de una persona, como sí propone la Red de Salud Mental del Parc Sanitari Sant Joan de Déu.
En cuanto a la atención primaria, ¿están preparados los profesionales y dotados de recursos suficientes para lograr una asistencia eficiente para estos pacientes?
La atención primaria, como sistema, está preparada y tiene recursos para dar una atención de calidad. Otra cosa es si los profesionales tienen el tiempo suficiente para atender este tipo de complejidad y si están suficientemente formados y sensibilizados para incorporar en su agenda la ingente labor de la atención al paciente complejo.
La atención primaria, como sistema, está preparada y tiene recursos para dar una atención de calidad. Otra cosa es si los profesionales tienen el tiempo suficiente para atender este tipo de complejidad
La experiencia, como mínimo en las áreas con las que he podido trabajar, es que disponen de profesionales con conocimientos para realizar una correcta detección. Además, en Cataluña disponemos de un sistema de cooperación entre la red de atención primaria y la red de Salud Mental, que fomenta el abordaje de las personas según su nivel de gravedad y complejidad, el PSP o Programa de Soporte a la primaria.
¿Cómo debería ser el trabajo conjunto entre los hospitales de día, los centros de atención primaria y los hospitales para favorecer la calidad de vida de los pacientes?
El paradigma por el que abogan usuarios y profesionales, en la línea de lo que se impulsa desde el Parc Sanitari Sant Joan de Déu, es una red integrada de atención, donde exista una continuidad asistencial y una coordinación entre los profesionales que no duplique la atención y permita mayor eficiencia. Asimismo, debe atender las diferentes necesidades en el momento correcto o incluso antes de que aparezcan.
A nivel de gestión, debemos asegurar que se incorporan todas las herramientas necesarias, se dispone de acceso a la formación y actualización de competencias de los profesionales, se evalúan las intervenciones para potenciar las que son eficientes y ofrecen mayor calidad asistencial que fomenta la innovación. El futuro nos traerá una mayor necesidad de atención a personas mayores, que presentan más enfermedades y muchas de ellas crónicas, con mayor dependencia y soledad. Tenemos un sistema sanitario y social que cuando sufre tensión financiera, la población sufre más y pierde cantidad y calidad de vida. Es imprescindible que entre todos lo hagamos sostenible.