Redacción
La jubilación activa de médicos y pediatras de atención primaria, tras la modificación de la Ley General de la Seguridad Social publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del pasado 28 de diciembre, ofrece la posibilidad de continuar ejerciendo durante unos años más. Si bien hay que ponderar distintos factores a la hora de tomar esta decisión, uno de ellos es el económico. Un nuevo informe del Sindicato Médico de Granada analiza los pros y los contras de acogerse a esta figura.
Firmado por el Dr. Vicente Matas, médico jubilado y coordinador del Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada, los cambios aplicados se recogen en la disposición transitoria trigésima quinta de esta ley. Se centra en la jubilación activa con compatibilidad del 75% de la pensión contributiva de jubilación con el trabajo de los facultativos de atención primaria médicos de familia y pediatras adscritos al sistema nacional de salud como estatutarios o funcionarios.
Asimismo, detalla que la duración será de tres años y solo para aquellos jubilados en su edad legal desde el 1 de enero de 2022 y los que se incorporaron tras decretarse la pandemia por Covid, aunque su jubilación hubiese sido anticipada. Esta jubilación puede ser tanto a tiempo completo como a media jornada, en la que se respeta el complemento de demora ya reconocido, si bien no computan para nuevo complemento. “Hay algunas comunidades autónomas en la que están denegando la jornada el 50% en este tipo de jubilación a pesar de necesitar profesionales”, recuerda el Dr. Matas.
Según los cálculos realizados para la jornada completa, la cuantía a ingresar en la declaración de la renta por tener dos pagadores se elevaría hasta los 18.600 euros netos al año en caso de tener jornada completa
Un aspecto a tener en cuenta es que esto supondrá que sean dos pagadores al año siguiente. Lo que influirá a la hora de hacer la declaración de la renta, para la que habrá que ingresar “una importante cantidad” por el incremento de la cuota resultante. Según los cálculos realizados para la jornada completa, esta cuantía se elevaría hasta los 18.600 euros netos al año. En el caso de la media jornada, serán retribuciones similares a jornada completa anterior (pero trabajando media jornada).
Otro punto es la “importante mejora” para esta forma de jubilación, en referencia a la conservación del complemento del 4% para quienes prolongan a jornada completa y del 2% en el caso de la media jornada. “Teniendo en cuenta la importante contribución que se hace a Hacienda del importe bruto del 75% de la pensión”, agrega.
Por todo ello, el Dr. Matas reflexiona acerca de la necesidad de conocer todos estos aspectos “para tomar una decisión acertada y de acuerdo con las circunstancias personales de cada uno”. “Pues depende si los ingresos son más necesarios ahora o bien puede ser interesante incrementar la pensión con el complemento de demora”, escribe.
“Una falta grave de relevo en atención primaria”
La situación de la atención primaria en nuestro país en los últimos años, que sufre “una falta grave de relevo” por el mayor número de jubilaciones que de ingresos de nuevos médicos especialistas que terminan su formación cada año (sin olvidar aquellos que prefieren ejercer en los hospitales, la sanidad privada o el extranjero) agrava esa brecha. Todo ello propiciado por las peores condiciones laborales que se dan en la sanidad pública y, en concreto, en la atención primaria.
De ahí que el autor del informe incida en que, si los resultados de haber hecho los cálculos en cada caso son satisfactorios, “sería necesario prolongar el tiempo algunos años más”. Debido a que el problema que se da en este nivel asistencial “persistirá pasado el año 2025” y habrá especialidades hospitalarias que podrían necesitar esta ayuda, debido también al mayor número de jubilaciones que de ingreso de MIR.