P.M.S
El asma afecta a cerca de un 5% de la población en España. Un grupo de investigadores ha descubierto una nueva causa del asma que abre la puerta a encontrar un tratamiento que pueda prevenirlo. Los resultados del estudio, publicados en la revista Science, sugieren que bloquear un proceso que normalmente causa la muerte de las células epiteliales podría prevenir el daño, la inflamación y la mucosidad que resultan de un ataque de asma.
La característica del asma que pone en peligro la vida es el ataque o la constricción de las vías respiratorias. El trabajo muestra por primera vez que muchas características de un ataque de asma como la inflamación, la secreción de moco y el daño a la barrera de las vías respiratorias que previene las infecciones son el resultado de esta constricción mecánica en un modelo de ratón.
“Nuestro descubrimiento es la culminación de más de diez años de trabajo. Como biólogos celulares que observamos los procesos, pudimos ver que la constricción física de un ataque de asma provoca una destrucción generalizada de la barrera de las vías respiratorias. Sin esta barrera, los pacientes con asma tienen muchas más probabilidades de sufrir inflamación a largo plazo, cicatrización de heridas e infecciones que causan más ataques. Al comprender este mecanismo fundamental, ahora estamos en una mejor posición para prevenir todos estos eventos”, afirma Josy Rosenblatt, bióloga celular del King’s College de Londres (Reino Unido) y autora principal del trabajo.
Los investigadores descubrieron que la extrusión celular impulsa la mayor parte de la muerte de las células epiteliales
La respuesta para detener los síntomas del asma puede residir en la extrusión celular, un proceso que los investigadores descubrieron que impulsa la mayor parte de la muerte de las células epiteliales. Los científicos utilizaron modelos de pulmón de ratón y tejido de las vías respiratorias humanas para descubrir que cuando las vías respiratorias se contraen, lo que se conoce como broncoconstricción, las células epiteliales que recubren las vías respiratorias se expulsan para luego morir.
Debido a que la broncoconstricción provoca tantas extrusiones celulares, daña la barrera de las vías respiratorias, lo que provoca inflamación y exceso de moco. En estudios anteriores, los científicos descubrieron que el compuesto químico gadolinio puede bloquear la extrusión. En este estudio, descubrieron que podría funcionar en ratones para prevenir el exceso de extrusión que causa daño e inflamación después de un ataque de asma.
Tratamiento experimental
“Las terapias actuales no previenen esta destrucción: un inhalador como el albuterol abre las vías respiratorias, lo cual es fundamental para respirar pero, lamentablemente, descubrimos que no previene el daño ni los síntomas que siguen a un ataque. Afortunadamente, descubrimos que podemos utilizar un compuesto económico, el gadolinio, que se utiliza con frecuencia para obtener imágenes por resonancia magnética, para detener el daño de las vías respiratorias en modelos de ratones, así como la consiguiente inflamación y secreción de moco. Prevenir este daño podría evitar la acumulación de musculatura que provocará futuros ataques”, explica Jody Rosenblatt.
Los investigadores descubrieron que se puede utilizar el gadolinio para detener el daño de las vías respiratorias en modelos de ratones, así como la consiguiente inflamación y secreción de moco
El profesor Chris Brightling, de la Universidad de Leicester y uno de los coautores del estudio, explica que el estudio identifica un nuevo proceso conocido como extrusión epitelial por el cual se produce daño al revestimiento de las vías respiratorias como consecuencia de la constricción mecánica y puede impulsar muchas de las características clave del asma. “Es probable que una mejor comprensión de este proceso conduzca a nuevas terapias para el asma”, subraya.
“La capa epitelial de las vías respiratorias proporciona una primera línea de defensa contra antígenos extraños y es fundamental para mantener la homeostasis del tejido”, subraya José Gregorio Soto Campos, director de la Unidad de Gestión Clínica de Neumología y Alergia del Hospital de Jerez y profesor en la Universidad de Cádiz, en declaraciones a Science Media Centre España.
José Gregorio: “El modelo animal debe trasladarse a pacientes asmáticos y ver que los inhibidores de la vía de la extrusión son igualmente eficaces”
“La experimentación expuesta en el artículo define el papel de la ruta de extrusión en controlar los síntomas posteriores de una crisis asmática y puede abrir un camino para futuras investigaciones de posibles dianas terapéuticas. El modelo animal debe trasladarse a pacientes asmáticos y ver que los inhibidores de la vía de la extrusión son igualmente eficaces. Faltaría definir biomarcadores futuros, pero podría ser útil en pacientes con exacerbaciones frecuentes”, concluye.