Cassandra, diagnóstico, datos e imágenes

Dr. Juan Carlos Trujillo, responsable del Servicio Mancomunado de Cirugía Torácica del Hospital de Sant Pau y del Hospital del Mar (Barcelona). Co coordinador del Proyecto Cassandra de cribado de cáncer de pulmón
En el entorno del cáncer, el de pulmón es el que más muertes provoca: cada 20 minutos fallece una persona por esta causa y sólo en España se diagnostican alrededor de 30.000 nuevos casos cada año de los cuales se calcula que un 80% están asociados al tabaquismo. Por otra parte, una de la causas que justifica una mortalidad tan elevada es porque se trata de una enfermedad silente, en la mayoría de los casos asintomática hasta que ya se encuentra en fase localmente avanzada o muy avanzada.

De esta manera, se nos plantean dos vías para reducir estas cifras de mortalidad: mejoras para conseguir la cesación tabáquica (prevención primaria) y la detección temprana a través del cribado en personas de riesgo. Y con estos dos objetivos nace el proyecto Cassandra (Cancer Screening, Smoking Cessation AND Respiratory Assessment), ideado por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) y desarrollado con todas las sociedades médicas dedicadas al diagnóstico, tratamiento e investigación en cáncer de pulmón, las sociedades científicas de atención primaria y con las organizaciones de pacientes afectados por esta patología.

Se ha demostrado que el cribado con TC de baja dosis permite la detección precoz del cáncer de pulmón en estadios tempranos

Se trata de una iniciativa piloto que tiene como objetivo demostrar la viabilidad del cribado en el sistema sanitario español, cargado de particularidades, a lo largo de los próximos cinco años. ¿Cómo? Proporcionando evidencia científica y datos sobre factibilidad que ayuden a implementar a escala nacional un programa de cribado para esta enfermedad. Algo que, por otra parte, ya se ha estudiado en otras regiones del mundo, como Estados Unidos o países vecinos de Europa, como Reino Unido, Italia o Alemania.

En concreto, se ha demostrado que el cribado con TC de baja dosis permite la detección precoz del cáncer de pulmón en estadios tempranos. Ensayos clínicos aleatorizados con tamaños muestrales de unos 50.000 pacientes han plasmado reducciones en las cifras de mortalidad y una mayor supervivencia con mejor calidad de vida para aquellos que padecen esta enfermedad.

Al mismo tiempo que analizamos la factibilidad de implementación de un proyecto piloto de cribado en España, con Cassandra también queremos demostrar los beneficios que tendría combinarlo con la prevención primaria, es decir, con fórmulas de cesación tabáquica. Y aprovechar estos recursos para abordar otras patologías frecuentes en los fumadores: la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), enfisema pulmonar, enfermedades intersticiales, e incluso patologías no pulmonares como la afectación coronaria, etc.

Con Cassandra también queremos demostrar los beneficios que tendría combinarlo con la prevención primaria, es decir, con fórmulas de cesación tabáquica

Creemos firmemente que esta iniciativa nos va a ayudar a detectar y a controlar de una manera más eficaz un mayor número de casos con problemas del sistema respiratorio. De la misma forma que va a sensibilizar a un mayor número de población fumadora para poder abandonar el tabaco de manera efectiva. Además, se va a convertir en una buena oportunidad para tener más datos que nos ayudarán a analizar el coste efectividad del cribado y a realizar perfiles de pacientes en función de la zona geográfica en la que residan.

De hecho, ese es otro de los objetivos de Cassandra: dar pie a la creación de un registro nacional con datos epidemiológicos y resultados del cribado, además de un banco de imágenes en red que proporcionen la información necesaria para crear un modelo de riesgo. El mayor beneficio de la creación de un modelo de riesgo es poder ser más precisos en la selección de casos a cribar. Toda esta información la reclama la estrategia nacional de cáncer para poder integrar estos cribados en la cartera nacional de servicios, de una forma similar a los que ya se han implantado para la detección temprana de cáncer de mama, colon y endometrio.

Aunque los resultados no llegarán hasta dentro de cinco años, creemos que España debe ir preparando el terreno para abordar este proyecto de forma amplia, igual que están haciendo otros países de nuestro entorno con buenos resultados. Para ello debe pensar en invertir un mayor número de recursos en prevención ampliando sus equipos de especialistas, sus equipos tecnológicos y de diagnóstico por imagen, como los de Fujifilm Healthcare, con el fin de que los cribados no impacten negativamente con la actividad sanitaria que ya se realiza. Una vía que mejorará la asistencia sanitaria para todos.

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