J. L. G. / J. P. R.
El pediatra de atención primaria juega un papel clave en la prevención del suicidio. La preocupación por el incremento de las tasas en los últimos años ha motivado la puesta en marcha del Plan de Acción para la prevención del Suicidio 2025-2027 por parte del Ministerio de Sanidad. Precisamente este será uno de los temas que la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (Semfyc) impartirá en su APDay 2025.“El tiempo dirá el grado de implementación y efectividad de estas medidas, pero ya es una buena noticia que se dé relevancia a este grave problema que afecta a los pacientes y sus familias, y se trabaje en la búsqueda de soluciones”, subraya en una entrevista con iSanidad la Dra. Mª Ángeles Moreno Fontiveros, miembro del Grupo de Atención al Adolescente de Semfyc.
Las conductas suicidas son uno de los principales problemas de salud en adolescentes. ¿Hasta qué punto cree que el recién aprobado Plan de acción para la prevención del suicidio de Sanidad puede ayudar a los profesionales de primaria?
El Plan de Acción para la prevención del Suicidio 2025-2027, impulsado por el Ministerio de Sanidad y las comunidades y ciudades autónomas, presenta seis líneas estratégicas para abordar este problema que evidentemente son adecuadas y necesarias. La conducta suicida es compleja y multifactorial, siendo varios los factores de riesgo personales, familiares y sociales que intervienen dificultando su abordaje.
“La información que circula por redes sociales ha contribuido al aumento de la demanda en nuestras consultas sobre salud mental”
Hasta ahora a pesar de los esfuerzos para la prevención de estas conductas, las tasas de suicidio han aumentado, especialmente entre la población adolescente. El tiempo dirá el grado de implementación y efectividad de estas medidas, pero ya es una buena noticia que se dé relevancia a este grave problema que afecta a los pacientes y sus familias, y se trabaje en la búsqueda de soluciones.
¿Cuándo determinar si la conducta del paciente joven que tenemos enfrente es o no patológica?
Las consultas relacionadas con la salud mental son un motivo frecuente de consulta, aunque no toda demanda implica un diagnóstico de enfermedad mental. La adolescencia es una etapa de cambios, un periodo de transición a la madurez, en el que el médico de atención primaria tendrá que discernir entre las características propias del momento vital del paciente y los signos de enfermedad. Las conductas serán patológicas en función de su intensidad, contexto, frecuencia, duración, y especialmente, la capacidad de alterar el funcionamiento parcial o global del adolescente. Cambios importantes, bruscos y mantenidos en el tiempo deben hacernos sospechar un trastorno mental.
¿Cómo afrontar la derivación a servicios de salud mental para que el paciente entienda que es la mejor opción frente a su patología mental?
La mejor herramienta para la evaluación es la entrevista clínica empática y comprensiva. Hay que personalizar según el paciente, trastorno que padezca, gravedad y sus circunstancias (familia, apoyos sociales, comorbilidades, …). En general, es un paciente que sufre y solicita ayuda, aunque no siempre de la forma más adecuada.
“Las conductas serán patológicas en función de su intensidad, contexto, frecuencia, duración, y especialmente, la capacidad de alterar el funcionamiento parcial o global del adolescente”
Es imprescindible lograr su confianza y posteriormente explicarle su problema y ofreciéndole la derivación como medio obtener nuevas herramientas para encauzar su vida. Es importante que el paciente no se sienta abandonado, siempre debemos mantener el seguimiento de estos pacientes desde atención primaria. No podemos olvidar la importancia del entorno y su familia que puede en algunos casos servirnos de apoyo, aunque para ello debemos de conocer previamente la dinámica familiar.
¿Por qué es relevante preguntar al paciente sobre su plan de suicidio o ideas suicidas?
Las preguntas sobre autolesiones o ideación suicida son imprescindibles para evaluar el riesgo de suicidio y con ello nuestra respuesta médica. Ante un plan de suicidio elaborado o expresión de intencionalidad suicida que se mantenga al final de la entrevista debemos derivar al paciente con carácter urgente para su valoración por los equipos de salud mental. Las preguntas sobre autolesiones o ideación suicida no provocan actos de autolesión, sino que frecuentemente reducen la ansiedad asociada a los pensamientos o los actos de autolesión y ayudan a que la persona se sienta comprendida.
Quizá una de las principales cuestiones en la práctica clínica diaria, y que analizarán durante un taller en el APDay 2025, es el saber afrontar la conversación con el paciente adolescente con posibles conductas patológicas. ¿Qué consejos le daría a sus compañeros y, en su caso, cómo las prepara?
El médico de atención primaria debe incentivar que el adolescente ocupe un lugar propio en la entrevista, sin el filtro de los padres. Es imprescindible establecer una relación de confianza con el paciente y su familia, pero sin olvidar que el paciente es el protagonista. La información que recogemos de los familiares es útil, por supuesto, pero es el adolescente el que debe ocupar un lugar central.
“La mejor herramienta para la evaluación es la entrevista clínica empática y comprensiva”
Debemos ofrecerle nuestra consulta como un lugar confidencial y seguro donde pedir ayuda e información, donde no se le culpabilizara ni a ellos ni a la familia. Debemos tener en cuenta que no siempre coincide la preocupación de los padres con la de los pacientes.
La principal herramienta para una detección precoz en este grupo de enfermedades es la entrevista clínica. Se explorará el comienzo y desarrollo de los síntomas. Estresores biopsicosociales, dificultad de adaptación y repercusión de los síntomas en la vida diaria del paciente y su familia. Desarrollo personal, respuesta ante extraños, miedos. Antecedentes personales, tratamiento que pueda estar tomando y que pudiera producir síntomas psicopatológicos. Funcionamiento académico y social. Presencia de abusos infantiles, violencia, antecedentes psiquiátricos familiares. Biografía familiar, roles pasados y presentes del adolescente. Se recogerá información del adolescente y los dos progenitores. Si es posible se recogerá también información de otros ámbitos como el escolar o los servicios sociales.
Además, se hará exploración física y pruebas complementarias si procede. Todo esto requiere tiempo que en atención primaria es escaso. En mi caso propongo al paciente y su familia una primera consulta programada en la que hablo con el paciente al solas y posteriormente acuerdo con él la intervención de los familiares en la entrevista, según la dinámica que se establezca y la respuesta del paciente se requiere más o menos consultas.
“Las preguntas sobre autolesiones o ideación suicida no provocan actos de autolesión, sino que frecuentemente reducen la ansiedad asociada a los pensamientos o los actos de autolesión”
¿Cuánto han propiciado las redes sociales el aumento de los diagnósticos de pacientes con TDAH y en qué casos se ha de plantear una evaluación neuropsicológica?
La información que circula por redes sociales ha contribuido al aumento de la demanda en nuestras consultas sobre salud mental, no es un fenómeno exclusivo del TDAH. Quiero pensar que no tiene relación con el aumento del diagnóstico de éste, es nuestra labor discernir entre aquellas conductas patológicas y conductas propias de la edad. Desde mi punto de vista, para el diagnóstico de TDAH es imprescindible realizar una exploración física general y neurológica (descartar patología orgánica) y exploración psicopatológica para el diagnóstico diferencial e identificación de comorbilidades.
Cuando el diagnóstico del paciente con TDAH es tardío, la evaluación neuropsicológica es especialmente importante, por la variabilidad en la expresión clínica en la edad adulta y que el retraso en el diagnóstico origina una mayor prevalencia de comorbilidades (consumo tóxicos, trastornos personalidad, trastorno ánimo,….) que dificulta el diagnóstico y tratamiento.
“El médico de atención primaria debe incentivar que el adolescente ocupe un lugar propio en la entrevista, sin el filtro de los padres”
¿Cuál es la principal función del médico de familia una vez que se diagnostica la enfermedad?
Me parece importante señalar que, ante el diagnóstico de enfermedad mental, el médico de familia es el que mejor puede acompañar al paciente y su familia, nuestra misión va más allá del diagnóstico y derivación de estos pacientes. Es importante acompañar a la familia y el paciente en el tratamiento, reforzar el cumplimiento de éste y vigilar posibles efectos adversos. Además, es necesario colaborar y apoyar en las decisiones que provengan de salud mental y no estigmatizar las patologías mentales.