..María Vargas. Directora de Relaciones Institucionales de iSanidad.
Dos personas en una misma habitación. Uno vestido de calle, otro con bata blanca. En otra sala, 35 personas más se acumulan ataviados con ropas cotidianas, esperando ser recibidos por el mismo médico. Todas ellas, deberán pasar por consulta en un horario de 8 de la mañana a 3 de la tarde. Además de toda esta larga lista de espera, una dura noche de guardia, habiendo dormido apenas unas cuantas horas. Esta “bata blanca”, indudablemente, va a tener que prestar máxima atención a cada paciente, realizando un diagnóstico o seguimiento certero, y sin olvidar la empatía y la relación médico-paciente.
En iSanidad estamos viendo noticias sobre profesionales sanitarios que han cometido errores médicos y que han sido condenados a indemnizar a pacientes con varios miles de euros por el fallo cometido. Errores que han tenido consecuencias para con el paciente, y por el que los médicos deben, sin duda, pagar un precio alto en un momento en el que las grandes multinacionales de Responsabilidad Civil están abandonando nuestro país por la baja rentabilidad que están obteniendo de los seguros médicos.
¿No deberíamos replantearnos poner los medios para que estos errores médicos no sucedan?
El salario de los médicos españoles es prácticamente un 60% menos que el de los profesionales sanitarios europeos, según el Informe de salarios médicos en España, con una media de 53.000€ brutos anuales, sin contar con la precariedad laboral que este sector sufre desde siempre, y no solo especialmente desde los años de la crisis.
En una profesión donde prima la vocación médica y el servicio público, el sacrificio de tiempo personal y la implicación humana, ¿no deberíamos replantearnos poner los medios para que estos errores médicos no sucedan? Un fallo que, en definitiva, no deja de ser humano y seguramente influido por las circunstancias laborales, no profesionales, ¿tiene que seguir ocurriendo diariamente cuando ponerle solución está al alcance del Sistema Nacional de Salud?
El sistema debe reconocer y ayudar a los que nos cuidan, porque es fundamental en este momento tan delicado en el que nos encontramos, donde se persigue el error del médico.
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