..Elena Santa María.
En los países desarrollados, la sepsis aumenta entre un 8 y un 13% al año. En España cada año la sufren 50.000 personas, de las que fallecen 17.000. Esta cifra es muy superior al número de fallecidos por infarto de miocardio o en accidentes de tráfico. Además, los costes hospitalarios del tratamiento de la sepsis son mayores que los de los ingresos a causa de infarto o ictus. El coste medio de un episodio de sepsis grave supone alrededor de 28.000 euros.
El hecho de que sea una enfermedad desconocida para la población general puede provocar un retraso en consultar al médico. Sin embargo, la identificación temprana del paciente con sepsis es fundamental. Cada hora de retraso en el inicio del tratamiento antibiótico eficaz conduce a un incremento de mortalidad del 7,6%.
Los costes hospitalarios del tratamiento de la sepsis son mayores que los de los ingresos a causa de infarto o ictus
Para evitar este retraso se ha puesto en marcha el protocolo Código Sepsis. La activación de este código moviliza el protocolo multidisciplinar, en el que están implicados enfermería, urgenciólogos, intensivistas, internistas y microbiólogos. La rápida intervención de los servicios de urgencias y emergencias, así como la activación del Código Sepsis conduce a una importante reducción de la mortalidad. España está a la vanguardia en el manejo de esta patología. En aquellos centros hospitalarios donde se ha puesto en marcha un sistema organizado y protocolizado de atención a estos pacientes –el Código Sepsis- los resultados en mortalidad han mejorado sustancialmente.
Cualquier persona es susceptible de desarrollar una sepsis en el contexto de un cuadro infeccioso. Pero la población más vulnerable son los ancianos, diabéticos, pacientes crónicos o inmunodeprimidos. El incremento de esta población, así como el aumento de infecciones por microorganismos resistentes a los antibióticos hacen que la incidencia de la sepsis haya aumentado.
