La relación médico-paciente como bien inmaterial de la humanidad. Dr. Juan Antonio Vargas

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..Dr. Juan Antonio Vargas. Decano de Medicina de la UAM. Jefe de Sección de Medicina Interna y Jefe de Estudios del Hospital Universitario Puerta de Hierro de Majadahonda.
El Foro de la Profesión Médica se constituyó hace once años como referente para abordar la sanidad, el SNS y el colectivo médico. Uno de los proyectos iniciados nació hace casi tres años a raíz de la iniciativa de un médico apasionado. El Dr. Patricio Martínez promovió que la relación médico-paciente sea considerada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

Esta iniciativa, de gran acogida en el seno del Foro de la Profesión Médica, está plasmada en un excelente libro. Presentado recientemente en la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid, corresponde al título “Manual de la relación médico-paciente”. Para su elaboración se ha contado con la colaboración de excelentes profesionales que han plasmado su experiencia desde la perspectiva histórica, social, clínica y psicológica.

Junto a Hipócrates y Osler, tenemos en nuestro país a Gregorio Marañón como ejemplo de médico humanista e inspiración

En este 2019 estamos celebrando el centenario de la muerte de William Osler y varias facultades y universidades se han adherido al Movimiento Hipocrático Internacional. Es evidente que, junto a Hipócrates y Osler, tenemos en nuestro país a Gregorio Marañón como ejemplo de médico humanista e inspiración. Para Don Gregorio, tratar con el máximo respeto a los enfermos era lo más importante en la práctica médica. Esta era la idea fundamental que intentaba inculcar y grabar a fuego en la mente de sus discípulos.

Es conocido que una vez un periodista le preguntó cuál había sido para él el avance más importante que había tenido la medicina. Don Gregorio respondió de forma muy precisa: “la silla”. Quería con ello subrayar que, en la práctica de la medicina, lo más importante era lo que contaba el paciente. Que dedicar tiempo a hablar con él y a mirarle a los ojos seguían siendo aspectos fundamentales e insustituibles de la relación médico-paciente.

Un periodista preguntó a D. Gregorio cuál había sido el avance más importante de la medicina, a lo que respondió: “La silla”

Ante el poder de las nuevas tecnologías diagnósticas y terapéuticas, el poder de la palabra y de la mirada son fundamentales en la relación médico-paciente. En definitiva, debemos volver a poner a la silla y, por tanto, a la relación médico-paciente en el centro del acto médico.

Bienvenida sea esta iniciativa y esperemos ver a la relación médico-paciente como bien inmaterial de la Humanidad. Si por cualquier circunstancia no se consiguiera, de lo que estoy seguro es que el camino habrá merecido la pena. Muchas gracias a los promotores.

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