..Juan Pablo Ramírez. Director de iSanidad.
Esta pasada semana hemos asistido a la primera sentencia contra una comunidad autónoma por no haber protegido a sus profesionales sanitarios. El juez ha condenado al Gobierno de Aragón y le obliga poner a disposición del personal los equipos de protección individual (EPI) adecuados. Casualidad o no, hace casi un mes la consejera de Sanidad de esta región, Pilar Ventura, se vio obligada a dimitir por unas inoportunas declaraciones acerca de las mascarillas y los EPI.
La sentencia es un aviso al resto de las comunidades autónomas y al propio Ministerio de Sanidad. En los próximos días vamos a ver más resoluciones judiciales de estas características. Durante casi tres meses de pandemia, sindicatos, colegios profesionales y diversas instituciones han denunciado a las consejerías y al Ministerio de Sanidad por no haber cumplido con su obligación: proteger a “nuestra primera línea” contra el coronavirus.
El Gobierno de Aragón es el primero en ser condenado por no haber puesto los equipos de protección necesarios a disposición de los profesionales sanitarios
El Gobierno de Aragón ha anunciado su intención de recurrir la sentencia. Es su derecho, pero quizás hubiera resultado más honesto entonar el mea culpa. La mayoría de los expertos coincide en que hasta que no esté aprobada la vacuna habrá una o incluso más olas epidémicas. Reconocer el error puede ser el primer paso para garantizar que ante futuros rebrotes los profesionales sanitarios y los de las residencias de ancianos contarán con el material de protección adecuado.
No es un problema exclusivo de la comunidad aragonesa, ha ocurrido en todas las regiones. Por este motivo contamos con la tasa más alta de profesionales sanitarios contagiados. Hace unos días lo corroboraba un artículo publicado en el British Medical Journal, firmado entre otros profesionales por los doctores, Javier Crespo, presidente de la SEPD, y Antonio Zapatero, presidente de Facme y vicencosejero de Salud Pública de la Comunidad de Madrid. La realidad es que contamos con más de 50.000 profesionales contagiados, el 20% de la cifra de diagnósticos y muy por delante de países como Italia, con un 10%, o Estados Unidos, con un 3%.
Durante estos casi tres meses se han contagiado más de 50.000 profesionales en España y han fallecido 70. Más de 7.000 permanecen de baja laboral. Todas las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad, que asumió el mando único, son los responsables de estos error. Más allá de responder en los tribunales, hay que buscar los medios y establecer soluciones para que esto no vuelva a suceder.
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