La mitad de los pacientes de asma grave carece de un control adecuado de la enfermedad

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..Redacción.
La mitad de los pacientes de asma grave en Europa Occidental carece de un buen control de la enfermedad. Es uno de los datos sobre los que la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) ha puesto el foco con motivo del Día Mundial del Asma, que se celebró el pasado 4 de mayo. Este grupo supone en la actualidad el 18% del total de pacientes asmáticos.

En países como España el asma grave supone el 50% del coste total de la enfermedad. En concreto, esta patología generó un gasto anual de 11.703 millones de euros. La prevalencia del asma ha experimentado en los países occidentales una evolución al alza debido, entre otros motivos, a los factores ambientales y a la contaminación. La presencia de esta enfermedad en regiones como la Comunidad de Madrid aumentó un 14%, mientras que las crisis asmáticas crecieron un 19% en el periodo comprendido entre 1996 y 2013. Así consta en el artículo Evolución de la prevalencia de asma y factores sociodemográficos y de salud asociados en población de 18 a 64 años de la Comunidad de Madrid, publicado en la Revista Española de Salud Pública.

La mitad de los pacientes de asma grave en Europa Occidental carece de un buen control de la enfermedad. Este grupo supone en la actualidad el 18% del total de pacientes asmáticos.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que esta enfermedad afecta en la actualidad a más de 334 millones de euros, según el informe Global Asthma Report 2014. Esta cifra podría verse incrementada en alrededor de 100 millones de personas, según las mismas estimaciones. Los autores del artículo publicado en la Revista Española de Salud Pública coinciden en que la prevalencia continuará avanzando especialmente en los países más ricos. Sin embargo, los países más pobres aportan el 80% de la mortalidad mundial.

En España se estima que la cifra global de afectados podría ascender a tres millones de personas, según datos del Centro de investigación biomédica en red de enfermedades respiratorias (Ciberes). La Encuesta Nacional de Salud de España prevé, por su parte, que la prevalencia de asma autopercibido alcanza entre el 4% y el 15% de la población española. Otros estudios ponen de manifiesto una mayor presencia de la enfermedad en la mujer. El 54,2% de los 560.000 catalanes que sufre asma son mujeres con una edad media de 41,3 años, según cifras de 2019 de la Consejería de Salud de la Generalitat de Cataluña.

Los factores de riesgo que han provocado este incremento de la prevalencia se dividen entre una predisposición genética y la exposición ambiental a una serie de sustancias y partículas inhaladas que pueden provocar reacciones alérgicas o irritar las vías respiratorias. El artículo cita el aumento de factores de riesgo intrínsecos, como la atopia, y una mayor exposición a factores de riesgo extrínsecos, como el polvo doméstico, los alérgenos animales, los pólenes, los sensibilizantes ocupacionales, la contaminación ambiental y la obesidad.

En España se estima que la cifra global de afectados podría ascender a tres millones de personas, según datos del Ciberes

En este contexto, Separ ha publicado el Documento de consenso de asma grave en adultos. Actualización 2020 y la actualización de 2021 de la Guía Española para el Manejo del Asma (GEMA), que está disponible para su descarga por internet.

El mal control de la enfermedad, especialmente en los pacientes con asma grave, y el incremento de la prevalencia ponen de manifiesto la necesidad de mejorar el seguimiento de estos pacientes. “Para el tratamiento adecuado de los pacientes con asma grave es fundamental, como en cualquier enfermedad, el correcto diagnóstico. Es importante tener en cuenta el bajo cumplimiento del tratamiento por parte del paciente, las comorbilidades, como la obesidad o la rinosinusitis y otros agravantes. Además, hay algunos pacientes que no responden a los tratamientos habituales a pesar de usarlo a dosis elevadas. Estos pacientes presentan un asma grave no controlada”, expresa el Dr. Francisco Javier Álvarez Gutiérrez, de la Unidad Médico-Quirúrgica de Enfermedades Respiratorias, Hospital Virgen del Rocío de Sevilla y miembro del Área de Asma de Separ.

El mal control de la enfermedad, especialmente en asma grave, y el incremento de la prevalencia ponen de manifiesto la necesidad de mejorar el seguimiento 

La receta electrónica se ha convertido en una herramienta clave para el seguimiento de los pacientes. Separ propone, en aquellas comunidades autónomas donde ya se ha puesto en marcha, comprobar si los pacientes han retirado los medicamentos. Con este mismo fin, la sociedad científica ha diseñado y validado el cuestionario Test de Adhesión a los Inhaladores (TAI) que permite estimar el cumplimiento de la terapia inhalada en los pacientes con EPOC y asma.

 Con la colaboración de Pfizer

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