Sara González (Amavir): “Debemos ofrecer un mayor apoyo a las personas en edad avanzada tras la pandemia”

Sara-González

..Victoria Guillén.
..Cristina Cebrián (fotografía y vídeo).
Durante la primera ola de la pandemia por Covid-19 en España, el grupo más afectado por el SARS-CoV-2 fue el de las personas mayores, entre las que se encuentran las personas que viven en residencias. Según un informe elaborado por el Ministerio de Derechos Sociales, Sanidad y Ciencia e innovación, en las residencias de mayores se han diagnosticado más de 98.000 casos positivos de Covid-19 desde que comenzó la pandemia. De ellos, el 28% contrajo el virus durante la primera ola. “Hemos tenido que adaptarnos a una situación muy dura producida por el Covid-19. Las personas mayores han sido el colectivo más vulnerable durante la pandemia. Para todos ha sido duro, pero para los pacientes mucho más”, ha manifestado Sara González, jefe médico del Grupo Amavir, en un coloquio organizado por iSanidad.

Las personas mayores han sido el colectivo más vulnerable durante la pandemia producida por el Covid-19

Así, González ha explicado cómo la crisis sanitaria les hizo replantear la práctica asistencial y la atención a las personas mayores frágiles dentro de las residencias. En este sentido, ha señalado que “hemos trabajado siempre con las guías y recomendaciones aportadas por las autoridades competentes, el Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas, con el objetivo de mantener una situación de seguridad en nuestros centros. Ahora mismo, nuestro apoyo a los pacientes debe ser superior tras la pandemia”.

Por su parte, Alejandro Buldón, fisioterapeuta en Amavir Getafe, ha apuntado que “hemos tenido que adaptarnos a las limitaciones de aforo, y realizar actividades al aire libre o en espacios muy bien ventilados. Pese a estas medidas, hay personas que han pasado el Covid-19 de una manera moderada y tienen secuelas que han producido que crucen el umbral de la dependencia”. Según los expertos, el ejercicio físico es un elemento clave para disminuir los efectos y secuelas del aislamiento. “Gracias el ejercicio periódico, muchos pacientes están recuperando su funcionalidad. Por ello, necesitamos seguir manteniendo las rutinas de actividad física en el tiempo para conseguir resultados positivos en nuestros pacientes”, ha declarado.

La crisis sanitaria obligó a las residencias a replantear la práctica asistencial y, sobre todo, a redefinir la atención de las personas mayores frágiles por su situación de vulnerabilidad

Asimismo, ambos expertos han recalcado la importancia de proporcionar un mayor apoyo emocional a las personas mayores tras la pandemia; también la necesidad de fomentar la motivación entre los residentes con el objetivo de mantener una rutina física diaria. “Concretamente durante el aislamiento, repartíamos los materiales de entrenamiento entre los pacientes y realizábamos vídeos sencillos sobre gimnasia. Nuestros residentes se reunían y practicaban las dinámicas según las indicaciones sanitarias y supervisados por el personal de atención directa. Creo que estamos consiguiendo fomentar el autocuidado en las personas mayores”, ha subrayado el fisioterapeuta. Finalmente, González ha concluido que “nosotros somos simplemente proveedores de soluciones y tenemos que adaptarnos a lo que realmente nuestros pacientes quieran. Ellos deben entender que entender que la promoción de la salud es una forma de aumentar el propio control sobre su salud”.

Noticias complementarias:

Opinión

Multimedia

Especiales

Atención primaria

Sanidad privada

iSanidadental

Anuario

Accede a iSanidad

Síguenos en