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Las pacientes con cáncer de mama avanzado deben recibir la vacuna Covid-19 lo antes posible. Además, la segunda dosis debe administrarse en seguida, tres o cuatro semanas después de la primera, según han advertido los expertos en la reunión virtual de la Sexta Conferencia Internacional de Consenso sobre Cáncer de Mama Avanzado. El Dr. Alexandru Eniu, oncólogo médico y jefe médico en el Hospital Riviera-Chablais, en Suiza, ha señalado en el encuentro que la evidencia científica demuestra que las vacunas son seguras para los pacientes de cáncer. Sin embargo, las vacunas que se basan en virus inactivados no deben usarse en pacientes de cáncer.
Los expertos advierten que las pacientes con cáncer de mama avanzado deben recibir la vacuna contra el Covid-19 sin demoras
Además, el doctor ha señalado que la vacunación no debe demorarse tampoco en el caso de pacientes que participan en ensayos clínicos. Asimismo, el hecho de estar vacunado tampoco debe impedir que los pacientes sean incluidos en esos ensayos. En el caso de las pacientes con tumores sólidos la investigación demuestra que un 80% tiene una respuesta inmune tras la segunda dosis.
“Aunque la magnitud de la respuesta inmune inducida por la vacuna es algo más reducida en los pacientes con cáncer, sigue siendo mejor que nada. Asimismo, los puede proteger contra el Covid-19. Las respuestas de anticuerpos deben interpretarse con cautela porque se trata solo de un indicador de la posible protección que ofrece la vacuna. Sin embargo, la evidencia científica indica que debe darse prioridad a la vacunación en todos los pacientes de cáncer y que los beneficios superan claramente a los riesgos”, ha señalado Eniu.
Según el Dr. Eniu, la respuesta inmune inducida por la vacuna es algo más reducida en los pacientes con cáncer, pero los puede proteger contra el Covid-19
“Numerosos estudios hasta la fecha demuestran que la vacunación contra el Covid-19 es segura para los pacientes oncológicos. Además, no tiene efectos secundarios o, si los tiene, son solo leves. Es importante señalar que para los pacientes tratados con inmunoterapia, la vacuna no exagera los efectos secundarios relacionados con lo inmunitario. E incluso en los pacientes que antes han sufrido efectos secundarios relacionados con la inmunoterapia, los efectos vinculados a la vacuna son leves”, prosigue.
El doctor ha destacado un estudio reciente sobre la vacuna de Moderna. Así, ha señalado que una minoría significativa de pacientes con tumores sólidos no desarrollan una adecuada respuesta de sus anticuerpos del coronavirus: el 7% de los que reciben inmunoterapia, el 16% en el caso de quimioterapia y el 11% de los que son tratados con ambas técnicas. “Además, un tercio de los pacientes presentan una respuesta de anticuerpos adecuada tras una dosis. Este es el motivo por lo que la segunda dosis resulta tan importante”, ha señalado.
Aun no hay suficiente evidencia científica aún sobre la eficacia de sucesivas vacunas de refuerzo, o sobre si se requieren medidas alternativas. Un estudio demuestra que en grupos pequeños de solo 20 pacientes que han recibido la tercera dosis se ha registrado un consistente aumento de los anticuerpos. Las directrices actuales recomiendan una tercera dosis para pacientes moderada o gravemente inmunocomprometidos dentro del primer año desde la primera dosis y al menos cuatro semanas después de la segunda dosis.
Según un estudio, las pacientes que han recibido la tercera dosis de la vacuna han registrado un consistente aumento de los anticuerpos
En una segunda presentación, la Dra. Laura Biganzoli, directora en funciones de la División de Oncología Médica y directora del Centro de la Mama en el Hospital Santo Stefano, en Italia, ha asegurado que “la pandemia de Covid-19 ha creado muchos retos inesperados. Nos hemos visto haciendo frente a una emergencia sin sabe exactamente cómo actuar. Pero, al tiempo, ha mostrado oportunidades para mejorar el cuidado de los pacientes”. Ella y sus compañeros implementan con rapidez medidas para intentar ofrecer el mejor cuidado posible a los pacientes.
Las medidas incluyen: encuentros con diversos profesionales de la salud relacionados con el cuidado de los pacientes; una mayor confianza en en el juicio médico propio sin depender tanto de los resultados de la imagen médica; y, la investigación radiológica de la respuesta tumoral al tratamiento.
Los médicos también valoraron con detenimiento la probabilidad de los beneficios reales de los tratamientos que se les ofrecían a los pacientes una vez habían fallado otros previos. Sin embargo, la Dra. Biganzoli ha señalado que aunque estas medidas permiten que el acceso a los servicios contra el cáncer resulten más accesibles a largo plazo, también acarrean un coste.
Dra. Cardoso: “Para las pacientes de cáncer que fueron vacunadas durante un tratamiento inmunosupresor, hay que considerar una tercera dosis”
La presidenta del 6º Congreso de Cáncer de Mama Avanzado, la Dra. Fátima Cardoso, directora de la Unidad de la Mama del Centro Clínico Champalimaud, en Portugal, ha destacado al respecto que “estas dos presentaciones ofrecen algunas respuestas y tranquilidad a nuestras pacientes de cáncer de mama avanzado en relación con el Covid-19. Ambas muestran cómo nos adaptamos a los retos que presenta la pandemia para que podamos continuar ofreciendo el mejor cuidado posible a nuestras pacientes. Y también subrayan el impacto emocional y psicológico que tiene la pandemia sobre ellas y sus cuidadores”.
Según señala, “la telemedicina tiene ventajas pero también desventajas graves, en especial para las pacientes de cáncer avanzado. La presentación destaca la importancia que tiene para todo el mundo, en especial las pacientes de cáncer de mama, de protegerse de la infección de covid-19 mediante la vacunación, tan pronto como sea posible, si es que no te han vacunado aún. Para las pacientes de cáncer que fueron vacunadas durante un tratamiento inmunosupresor, hay que considerar una tercera dosis. Eso salvará vidas”, asegura.
