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Las reacciones alérgicas provocadas por la anestesia suponen uno de los principales retos diagnósticos para los alergólogos. La razón es que se trata de reacciones graves con alto riesgo de fallecimiento para el paciente. Aun así, la frecuencia de estas reacciones adversas durante la anestesia oscila en torno a 1 de cada 385 a 1.480 intervenciones. Así se puso de manifiesto durante el Simposio Internacional de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic), celebrado estos días en Palma de Mallorca.
El Dr. Gabriel Gastaminza, miembro del Comité de Alergia a Medicamentos de la Seaic, explicó que estas reacciones “suelen ocurrir cuando al paciente se le han administrado una gran cantidad medicamentos de forma simultánea. Por este motivo, en aproximadamente un 10% de los casos, es necesario interrumpir la intervención. Aunque en otras ocasiones no se llega a iniciar la operación, ya que la reacción ocurre durante la inducción anestésica“.
Dr. Gastaminza: “En aproximadamente un 10% de los casos de reacciones alérgicas a la anestesia, es necesario interrumpir la intervención. Aunque en otras ocasiones no se llega a iniciar la operación”
Para poder determinar la causa de esta reacción es imprescindible realizar un estudio alergológico. En este sentido, también hay que tener en cuenta que los medicamentos administrados durante una intervención tienen efectos farmacológicos que pueden complicar la realización del estudio alergológico. Asimismo, es difícil que el paciente facilite los datos que ayuden al diagnóstico ya que, cuando ocurre una reacción, suele estar dormido. Estos datos son: el tipo de síntomas que presentó, los fármacos utilizados, etc..
“Esa información se encuentra en la nota clínica del anestesista que en ocasiones no figura en los informes médicos. Por lo tanto, el alergólogo se enfrenta a un paciente que no recuerda exactamente qué le ocurrió y es necesario buscar información a través de otros especialistas que, en ocasiones, por la sobrecarga asistencial, no es fácil de recoger“, advierte el Dr. Gastaminza.
En algunos hospitales españoles ya se han creado equipos de alergólogos y anestesistas que trabajan en conjunto para recoger datos de las reacciones alérgicas
Trabajo multidisciplinar entre alergólogos y anestesistas
De ahí que sea fundamental la colaboración entre los médicos de los servicios de Alergología y de Anestesia. Para ello, en algunos hospitales españoles ya se han creado equipos de alergólogos y anestesistas que trabajan en conjunto. Así, se ocupan de recoger los datos de las reacciones y de discutir los casos complejos.
“La mayoría de las reacciones suelen estar causadas por una alergia a los antibióticos administrados como prevención en el acto quirúrgico; o por los fármacos anestésicos, especialmente relajantes musculares. Pero los posibles agentes causantes son muy diversos: antiinflamatorios y analgésicos, opioides, antisépticos, colorantes, productos de la sangre para transfusión o los guantes de látex de los cirujanos pueden ser algunos de ellos“, explica el especialista.
Los posibles agentes causantes son muy diversos: antiinflamatorios y analgésicos, opioides, antisépticos, colorantes, productos de la sangre para transfusión o los guantes de látex
Este año se ha puesto en marcha un estudio a nivel nacional, en el que participan catorce hospitales de diversas comunidades autónomas, liderado por el Dr. José Julio Laguna, del Hospital Universitario Central de la Cruz Roja de Madrid.
Esta investigación, financiada por el Instituto Carlos III, pretende conocer la frecuencia de estas reacciones en España e investigar los mecanismos involucrados en ellas; si son realmente por alergia o no, y crear unidades alergólogo-anestesista que vayan expandiendo esta forma colaborativa de trabajar. “Los especialistas involucrados en este proyecto confían en que de esta colaboración surja un crecimiento en el conocimiento de estas alergias tan complejas“, concluye el alergólogo.
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