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Más de 300.000 médicos jóvenes de toda Europa representados por la European Junior Doctors (EJD), han aprobado una resolución de apoyo a las manifestaciones de la profesión médica en Madrid y Cantabria. La resolución ha salido adelante en el encuentro que mantuvo esta asociación la semana pasada en la ciudad de Oslo (Noruega). Los médicos jóvenes consideran que los motivos de las protestas son la “falta de voluntad política” para mejorar las condiciones laborales de la profesión médica en España ante las carencias de profesionales sanitarios. También destacan que “está creando un entorno extremadamente peligroso para los médicos y los pacientes”.
La asociación de médicos jóvenes de Europa ha emitido una resolución de apoyo a los médicos españoles en sus reivindicaciones
La iniciativa de la resolución parte de la delegación del Consejo General de Médicos, liderada por el Dr. Domingo Antonio Sánchez, y hace un llamamiento a los gobiernos autonómicos y central para que “estén a la altura de las circunstancias y dé un paso adelante” para mejorar las condiciones laborales de los médicos.
La EJD ha advertido de que la asistencia sanitaria en Europa “está al borde del precipicio”. Es un problema que no solo se circunscribe a la situación española. La demanda de la asistencia sanitaria en Europa está aumentando constantemente en un contexto en el que se ha dado una pandemia sin precedentes, una guerra en Europa y la recesión económica que ya se vislumbra.
La EJD ha advertido de que la asistencia sanitaria en Europa “está al borde del precipicio”
Señalan que, en este escenario, los médicos jóvenes de Europa tienen el reto de proporcionar servicios seguros atención médica en sistemas “que no cuentan con fondos suficientes, personal y recursos insuficientes”. Además, lamentan que los médicos jóvenes y el personal sanitario “están sufriendo daños psicológicos, físicos y agotamiento”. La EJD exige que la Unión Europea y los gobiernos nacionales aborden de manera urgente esta crisis, “antes de que el daño sea irreparable”.
En el caso de España, la situación ha comenzado en Madrid y Cantabria pero es probable que se extienda a otras regiones españolas. Entre ellas, Valencia, Murcia y Extremadura. En las últimas semanas los médicos españoles han sido testigos de declaraciones políticas contra los médicos, sus sindicatos y los órganos de representación profesional. Un factor que desde la OMC consideran que alimenta un clima de tensión que puede favorecer la violencia hacia los profesionales.
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