Cristina Cebrián
El uso excesivo de antibióticos en casos en los que no es necesario puede favorecer las resistencias antimicrobianas. Para evitarlo, se recomienda a los pediatras que no prescriban antibióticos a niños con infecciones virales leves, como el catarro de vías altas, laringitis, bronquitis y bronquiolitis. Esta es una de las prácticas a evitar que se incluyen en un documento que ha coordinado el Comité de Calidad Asistencial y Seguridad del Paciente de la Asociación Española de Pediatría (AEP) y en el que participan las diferentes sociedades científicas del ámbito de la pediatría.
“En la atención de los niños y adolescentes hay algunas prácticas que no son adecuadas o que no aportan nada e incluso pueden perjudicar. Aunque desde las sociedades de especialidades pediátricas han realizado recomendaciones de “no hacer” relacionadas con su área, en este proyecto se han elaborado desde un punto de vista más transversal. El objetivo es que sean útiles para los profesionales de los distintos ámbitos de la atención pediátrica”, explica la Dra. Aurora Madrid, coordinadora del Comité de Calidad Asistencial y Seguridad del Paciente de la AEP.
Dra. Aurora Madrid: “En la atención de los niños y adolescentes hay algunas prácticas que no son adecuadas o que no aportan nada e incluso pueden perjudicar”
A la hora de prescribir medicamentos, los pediatras deben hacerlo en unidades de masa, (como miligramos), concentración o presentación específica, en lugar de hacerlo en cucharadas. Además, según el Grupo Español de Farmacia Pediátrica de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (GEFP-SEFH), “no se debe prescribir sin comprobar el peso actual del paciente, alergias, contraindicaciones y posibles interacciones”.
En línea con la indicación de fármacos por parte de los pediatras, la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AepAP) pide evitar prescribir fármacos inhalados apacientes con asma “sin educar al niño y la familia en la técnica adecuada a cada edad”. Además, los pediatras de AP no deben retrasar la administración de adrenalina por vía intramuscular en la anafilaxia ni tratar faringoamigdalitis con antibiótico sin confirmar la etiología bacteriana.
Desde la Sociedad Española de Cuidados Intensivos Pediátricos señalan, como práctica a evitar, la prolongación del tratamiento antibiótico más tiempo del recomendado
Neonatología y cuidados intensivos pediátricos
Desde la Sociedad Española de Cuidados Intensivos Pediátricos (Secip), señalan como práctica a evitar la prolongación del tratamiento antibiótico más tiempo del recomendado. Tampoco consideran adecuado “demorar la colocación de un acceso intraóseo en un paciente en parada cardiorrespiratoria o peligro inminente de parada por canalizar una vía venosa central”. Otra de las prácticas que la Secip destaca como “insegura” es dar de alta sin supervisión sanitaria a un paciente que ha recibido sedación para un procedimiento antes del restablecimiento de su situación basal previa.
Por último, los neonatólogos a través de la Sociedad Española de Neonatología (Seneo), piden que no se realicen técnicas invasivas en el neonato “sin haber valorado y manejado el dolor con medidas farmacológicas y/o no farmacológicas”. Tampoco recomiendan separar al hijo de la madre, “siempre que haya una alternativa posible”. Por último, otra práctica a evitar en el área de la neonatología es “pinzar precozmente el cordón umbilical en recién nacidos a término o prematuros tardíos que no precisen reanimación”.