G.M.
Este martes, uno de diciembre, como cada año se conmemora el Día Mundial del Sida, en un año en el que los ojos y los esfuerzos de la investigación y de la práctica clínica se han enfocado en una nueva pandemia, la del Covid-19. Pese a su impacto, Naciones Unidas espera que para 2030 el Sida deje de ser una amenaza para la salud pública en el mundo. El próximo mes de junio se cumplirán 40 años desde los primeros casos de la infección, dados a conocer por los CDC en Estados Unidos.
Pese al impacto de la pandemia de Covid-19, Naciones Unidas espera que para 2030 el Sida deje de ser una amenaza para la salud pública en el mundo
Aún no hay datos sobre cómo ha podido afectar esta nueva enfermedad infecciosa que recorre el mundo desde principios de 2020 a la detección y los tratamientos de nuevos casos positivos de VIH y la enfermedad que genera, el Sida. Pero según proyecciones de Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSida), el impacto a largo plazo de la pandemia de Covid-19 en la respuesta al VIH, muestra que podría haber entre 123.000 y 293.000 nuevas infecciones por VIH adicionales y entre 69.000 y 148.000 muertes más relacionadas con el Sida entre 2020 y 2022.
José Alcamí, científico en el Centro Nacional de Microbiología del ISCIII y director de la Red de Investigación de Sida (RIS) ha señalado que durante este año, “a pesar de las dificultades originadas por la pandemia de Covid-19 no hemos dejado de trabajar”. Explica en un vídeo disponible en la web del Instituto de Salud Carlos III, que los desafíos del VIH persisten. “Hemos de frenar las infecciones, luchar contra el estigma y la discriminación y disminuir el impacto de la infección de los países menos favorecidos, en los que, todavía, en 2019 murieron 700.000 personas y 150.000 niños fueron infectados”.
El impacto a largo plazo de la pandemia de Covid-19 en la respuesta al Sida: hasta 293.000 nuevas infecciones por VIH adicionales y 148.000 muertes más entre 2020 y 2022
En el campo de la investigación, continúa el investigador español, “los dos grandes desafíos son conseguir fármacos que permitan la curación efectiva de la infección y obtener vacunas preventivas frente al VIH”. Así, los grupos del Laboratorio de Retrovirus del Centro Nacional de Microbiología (CNM) trabajan en diferentes líneas de investigación y contribuyen al diagnóstico de los pacientes con VIH con el estudio de resistencias. Entre otros aspectos, participan en el desarrollo de nuevos fármacos y de prototipos de vacunas preventivas. “Esta epidemia, la del Covid-19 pasará y estad convencidos de que también lograremos controlar la epidemia de VIH”, concluye Alcamí.
El Ministerio de Sanidad ha hecho hincapié en que “a pesar de la grave pandemia que estamos viviendo, no podemos bajar la guardia” con respecto al Sida. Y añade que “hemos de mantener las medidas de prevención de la infección por el VIH y la atención de las personas afectadas”. El Ministerio se había propuesto que este año España alcanzara los indicadores 90-90-90 y 90, así como la 0 discriminación y la reducción del 75% de las nuevas infecciones por el VIH con respecto a 2010.
José Alcamí: “A pesar de las dificultades originadas por la pandemia de Covid-19 no hemos dejado de trabajar”
Aseguran que el balance “es positivo”, aunque no se han alcanzado todos. Se diagnostica cerca del 90% de los casos de VIH; el 97% de las personas diagnosticadas fueron tratadas con antirretrovirales y el 90% de las personas en tratamiento antirretroviral están con carga viral suprimida. Respecto al cuarto 90, sobre calidad de vida, en 2019 se midió por primera vez y un 68% de las personas con el VIH en tratamiento valoró su calidad de vida como buena o muy buena.
ONUSida, a través del informe Vencer las pandemias con las personas en el centro de la respuesta, ha pedido a los países que inviertan mucho más en la respuesta mundial a cualquier pandemia y que adopten un nuevo conjunto de objetivos “exigentes y ambiciosos pero que se pueden alcanzar” para el VIH Sida con la meta de 2025.
ONUSida plantea nuevos objetivos para el VIH Sida con la meta de 2025
Los nuevos objetivos de prestación de servicios relacionados con el VIH tienen como meta lograr una cobertura del 95% para quienes viven con el VIH y corren un mayor riesgo de contraerlo. Los objetivos de 2025 también requieren garantizar un entorno propicio para una respuesta eficaz al VIH e incluyen lograr que menos del 10% de los países cuenten con leyes y políticas punitivas que propicien la discriminación de las personas con Sida o con mayor riesgo de infectarse. También quieren lograr que menos del 10% de las personas que viven con el VIH y están afectadas por él experimenten estigma y discriminación y menos del 10% experimenta desigualdad de género y violencia.
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