El CSIC desarrolla un material que bloquea la propagación del SARS-CoV-2 para recubrir mascarillas, tejidos y superficies de contacto

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Foto: CDC. Partículas del virus SARS-CoV-2, coloreadas en azul, en una imagen de microscopio de electrones

..Redacción.
Nanopartículas de cobre componen un nuevo material que inhibe las proteínas del SARS-CoV-2 y bloquea su propagación. El material se puede usar para recubrir mascarillas quirúrgicas y tejidos de protección de uso hospitalario, pero también se puede aplicar en el recubrimiento de superficies de contacto como barandillas o pomos en el trasporte público. El nanomaterial ha desarrollado y patentado un equipo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que están estudiando su desarrollo industrial para ponerlo en el mercado.

Nanopartículas de cobre componen el material del CSIC que inhibe las proteínas del SARS-CoV-2 y bloquea su propagación

Según explica el investigador José Miguel Palomo, del grupo de Química biológica y Biocatálisis del Instituto de Catálisis y Petroleoquímica del CSIC (ICP-CSIC), la tecnología del material “consiste en unas nanopartículas que interaccionan sobre las proteínas del coronavirus modificándolas a través de un mecanismo de oxidación y bloqueando su capacidad para infectar las células humanas”.

El CSIC señala que el material es muy eficiente inhibiendo las proteínas funcionales del SARS-CoV-2, especialmente la proteasa 3CLpro, que interviene en el proceso de replicación del virus, y la proteína spike, la que permite la entrada del virus en las células humanas. Así lo ha demostrado el equipo de Palomo en colaboración con investigadores de los institutos de investigación de Aragón y de la Universidad de Zaragoza. “Estas nanopartículas de cobre están homogéneamente distribuidas embebidas sobre una matriz proteica, generando así un material biocompatible, que además permite mantener las nanoparticulas adheridas”, indica Palomo, que ha liderado el desarrollo.

“Consiste en unas nanopartículas que interaccionan sobre las proteínas del coronavirus modificándolas a través de un mecanismo de oxidación y bloqueando su capacidad para infectar las células humanas”

La elevada eficacia viricida de este nanomaterial se debe a que el componente activo son nanopartículas de cobre de muy pequeño tamaño. Esto incrementa incrementa la eficiencia.. Pero también se debe a que está formada por especies de cobre con un único estado de oxidación. Esta circunstancia permite obtener una alta actividad biológica que no se ha observado con otros compuestos, según detallan los investigadores.

El material ya ha sido probado en el recubrimiento de mascarillas quirúrgicas homologadas de polipropileno, o en batas de tela de algodón. “Permitiría disponer de un nuevo tipo de mascarillas efectivas con inactivación directa frente al SARS-CoV-2, además de impedir la trasmisión por barrera mecánica (filtración). Además permitiría contar con agentes textiles de protección para uso hospitalario”, detallan los investigadores. También se ha aplicado con éxito sobre materiales metálicos como el acero o el hierro. Por tanto puede recubrir superficies como barandillas o pomos en el transporte público, entre otros.

El CSIC señala que el material es muy eficiente inhibiendo las proteínas funcionales del SARS-CoV-2, especialmente la proteasa 3CLpro y la spike

Los científicos destacan la estabilidad de este nanomaterial incluso a temperaturas de más de 80º. Aseguran así su “extrema fiabilidad” a temperaturas de hasta 50-60º para, por ejemplo, la reutilización de mascarillas. El cobre presenta ventajas frente a otros metales descritos como antimicrobianos como la plata. Además de la diferencia de precio, el cobre mantiene su eficacia en un rango de temperatura y humedad. Por otra parte, la toxicidad de la plata es 65 veces mayor que la del cobre, según la Agencia de Protección Medioambiental (EPA).

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