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La pandemia generada por el Covid-19 ha puesto en riesgo los sistemas de salud mejor valorados del mundo. Así, se ha acelerado la necesidad de una atención sanitaria virtual ya que la distancia interpersonal es básica para proteger la salud de médicos y pacientes. Uno de los aspectos más destacables en este periodo ha sido el auge en la implementación de la telemedicina en España. Las consultas de telemedicina en España han aumentado un 153% desde que se decretó el estado de alarma, según un estudio realizado por mediQuo. Este indica que las consultas sobre salud general y dudas sobre el SARS-CoV-2 han ocupado la mayoría de estas.
Las consultas de telemedicina en España han aumentado un 153% desde que se decretó el estado de alarma, según un estudio realizado por mediQuo
Las comunidades autónomas que más están utilizando este servicio son Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid. No obstante, las regiones donde más creció el uso de la telemedicina durante la pandemia fueron Cantabria, con un incremento del 390%, seguida la Rioja, con un 300% y Galicia, con un 202%. Los datos demuestran cómo el mundo sanitario se estaría adaptando a una sociedad plenamente conectada. Las herramientas digitales han facilitado la función de reorganizar la actividad para hacer frente a la pandemia.
“La expansión de la telemedicina estaría permitiendo empoderar al paciente, darle seguimiento continuo, mejorar la calidad asistencial, reducir costes y listas de espera, poder atender a quienes se encuentran en zonas de difícil acceso, o resolver dudas y consultas a distancia, entre otros“. Así lo recoge el informe de la Fundación IDIS ‘Sanidad privada, aportando valor: Análisis de la situación 2021‘.
“La expansión de la telemedicina estaría permitiendo empoderar al paciente, darle seguimiento continuo, mejorar la calidad asistencial, reducir costes y listas de espera…”
Según destacan, en el futuro no se hablará de la telemedicina porque formará parte del proceso convencional de atención médica. En este sentido, señalan que los profesionales de la sanidad tradicional serán muy importantes para impulsar la adopción de la sanidad digital en el futuro. “La telemedicina nos permitiría un uso más eficiente de los recursos y aliviaría la presión asistencial sobre la red sanitaria“, destacan.
El documento resalta que los ciudadanos están cada vez más predispuestos a usar la tecnología en el ámbito sanitario. Por tanto, estarían abiertos a explorar nuevas opciones de servicio que se irían consolidando a medida que se vayan familiarizando con esta tecnología. “El futuro de la sanidad digital pasaría por un esfuerzo coordinado para ofrecer la atención, los servicios y los tratamientos que necesiten los ciudadanos en cualquier momento y lugar para generar confianza, seguridad y respeto en todos los casos“, concluye el informe IDIS.
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