..Rosario Velarde Saiz, presidenta del Colegio Oficial Higienistas Dentales Comunidad Valenciana (Cohdcv).
El colectivo de higienistas dentales, representado por sus colegios profesionales y asociaciones, lleva años pidiendo un desarrollo en su competitividad profesional a través del reconocimiento de su formación como grado universitario en lugar de ciclo superior de formación profesional.
Al higienista dental español le resulta difícil entrar en el juego del libre mercado fuera de nuestras fronteras, ya que en otros países de la UE el higienista dental es un profesional sanitario con formación universitaria. A los higienistas dentales españoles no se les puede reconocer su formación en la Unión Europea, lo que dificulta sus proyecciones de futuro.
“La realidad diaria del sector sanitario avanza muy rápido en comparación con la normativa educativa”
Es necesario ampliar la carga lectiva y los contenidos formativos que conlleven un desarrollo y adquisición de más competencias profesionales, sobre todo en el ámbito de la prevención, igualándose a sus colegas europeos. ¿Por qué los políticos venden continuamente la imagen de una España que está a la altura de los países miembros de la UE? ¿Podemos equipararnos a países como Italia, Portugal, Suiza o Noruega, cuando tenemos sanitarios bloqueados entre nuestras fronteras porque no son iguales ante el sistema educativo de otras naciones?
Resulta irónico saber que hay países europeos que demandan higienistas dentales, pero que los españoles encuentran verdaderas barreras externas para poder cubrir esa demanda. Muchos desisten en su intento de trabajar en el extranjero, dadas las trabas de equiparación de títulos.
“Los higienistas dentales exigen tener una formación de 240 ECTS, equiparables con Europa”
Se debe actualizar la ley del 86 sobre profesionales sanitarios: odontólogos, protésicos e higienistas dentales. Han transcurrido más de 35 años desde su publicación y es vital modificar el modelo formativo del higienista dental para adaptarlo al mercado europeo. Contenido obsoleto y ambiguo, que no refleja la realidad profesional y que está generando una polémica innecesaria en el sector odontológico. Una ley que en vez de propiciar un trabajo en equipo y multidisciplinar está ocasionando fricciones innecesarias que bloquean el buen funcionamiento del equipo clínico.
La realidad diaria del sector sanitario avanza muy rápido en comparación con la normativa educativa. El concepto de salud se extiende día a día en la conciencia de la ciudadanía y es necesario dotarla de profesionales, cada vez mejor formados, para dar un servicio comunitario a la altura de la realidad social en la que vivimos.
Los higienistas dentales están fuera de las referencias del Marco Europeo de Cualificaciones para el Aprendizaje Permanente y del Sistema Europeo de Transferencia y Acumulación de Créditos (con un mínimo de 180 ECTS) ya que, en España, la formación del colectivo es de 120 ECTS, con 2.000 horas lectivas.
Es evidente que el fin de cualquier modificación normativa debiera ser adecuar el currículum académico a la formación y cualificaciones profesionales de la mayoría de los países más avanzados de la UE. Dicho esto, la administración debe de tomar cartas en el asunto y valorar la situación de desequilibrio que se está fomentando desde España con los técnicos sanitarios, entre ellos, los higienistas dentales.
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