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El sector sanitario privado colabora y se engrana con el sistema público de salud, siendo un aliado fundamental de este. Durante la pandemia, la sanidad privada ha llegado a atender al 19% de los pacientes con afectación Covid-19 y al 14,2% de los pacientes ingresados en unidades de cuidados intensivos (UCI), según la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE). “La cooperación entre ambos sectores es un pilar fundamental para garantizar la sostenibilidad y la solvencia del sistema“, destaca el informe de la Fundación IDIS “Sanidad privada, aportando valor: Análisis de la situación 2021“.
Según señala el documento la sanidad pública y privada logran crear una “única red que dota a nuestro país de una asistencia sanitaria, no solo de máxima excelencia y calidad, sino también accesible“. En este sentido, destacan la colaboración que ha existido entre sectores ante la magnitud del reto producido por la pandemia de SARS-CoV-2.
El sector privado es un aliado estratégico fundamental del sistema público de salud
“La colaboración entre ambos sectores en sus diferentes modalidades (conciertos, mutualismo administrativo y concesiones) permite descargar de presión asistencial y financiera a la sanidad pública, y evita duplicidades y riesgos innecesarios, al tiempo que ofrece una asistencia sanitaria de calidad reconocida y contrastada, favoreciendo, a su vez, la accesibilidad y la rapidez en la realización de actos médicos“, detalla el informe IDIS.
Además, resalta que gracias a esta interdependencia entre ambos sectores se está logrando equilibrar los flujos de acceso para toda la población. A nivel económico, este tipo de colaboración no solo descarga las arcas públicas con costes medios por proceso más ajustados, sino que contribuye a “aliviar significativamente las listas de espera“. La sanidad privada y la pública, además, se complementan en tecnología y profesionales.
La colaboración entre sanidad pública y privada contribuye a “aliviar significativamente las listas de espera” en beneficio de los pacientes
Tal y como pone de manifiesto el informe, el aprovechamiento de todos los recursos disponibles, independientemente de su titularidad, debería de ser un objetivo indispensable que comprometiese al sector público y al privado en la gestión eficiente y efectiva del sistema. Así, se permite obtener unos niveles de asistencia óptimos y adecuados para la población.
La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) en su “Libro blanco de la Sanidad” hace una firme defensa de la sanidad privada y de las diferentes formas de colaboración. Advierten que un escenario exclusivamente público no podría afrontar por sí solo las elevadas exigencias de todos los pacientes de nuestro país sin adoptar medidas económicas de emergencia.
En esta línea, el documento recuerda que España cuenta con una larga tradición en algunas de las fórmulas de colaboración público-privada. Por ejemplo, los conciertos que se llevan a cabo entre los servicios regionales de salud y los centros de titularidad privada. Así como el mutualismo administrativo y las concesiones administrativas que incluyen la gestión de servicios sanitarios.
“Los mecanismos de colaboración público- privada contribuyen de manera significativa a la sostenibilidad del sistema”, asegura el informe
Conciertos
Por un lado, están los conciertos para pruebas y procedimientos diagnósticos y terapéuticos. “Suponen un desahogo para las listas de espera, especialmente en diagnóstico por imagen e intervenciones quirúrgicas“, indica el informe. Asimismo, están los conciertos para determinadas prestaciones sanitarias. “Fundamentalmente terapias respiratorias, diálisis, rehabilitación, logopedia y transporte sanitario“.
Otro tipo son los conciertos singulares, donde hospitales privados ofrecen asistencia sanitaria a un área poblacional con infraestructuras sanitarias insuficientes. Destacan, entre otros, la Fundación Jiménez Díaz (Madrid), Fundación Hospital Jové (Asturias), la Orden San Juan de Dios en diferentes comunidades autónomas y varios hospitales en Cataluña integrados en la Red de Hospitales de Utilización Pública.
Mutualismo administrativo
El mutualismo administrativo es un mecanismo de cobertura sanitaria de aproximadamente 1,75 millones de funcionarios a través de Muface, Mugeju e Isfas. La financiación es pública y los beneficiarios eligen cada año recibir provisión pública o privada. El informe recoge que aproximadamente el 83,4% de los funcionarios se decantan por la provisión privada.
El 83,4% de los funcionarios elige ser atendido por una entidad aseguradora
Concesiones administrativas que incluyen la gestión de servicios sanitarios
Actualmente, en España existen 9 hospitales (4 en la Comunidad Valenciana, 4 en Madrid y 1 en La Rioja) bajo este modelo de concesión que incluye la construcción de hospitales y la gestión de los servicios sanitarios y no sanitarios. En concreto, los principales agentes en este modelo de colaboración son Ribera Salud y Quirónsalud.
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